El 1 de octubre, como viene ocurriendo desde 1990, se conmemoró el Día Internacional de las Personas de Edad, que fue decretado por la ONU en el año antes mencionado. Una población que en Chile es cada día más grande, y tiene una importancia preponderante en el desarrollo de la nación.

Más allá del tema de las pensiones y jubilaciones, que ha dado mucho que hablar en el último tiempo, lo cierto es que hay una realidad innegable: las personas, en promedio, están viviendo más no solo en Chile, sino en el mundo. Es por esto que debe existir una preocupación especial hacia este segmento, que sin dudas aun no tiene la importancia que se merece en los planes gubernamentales asociados específicamente a los denominados adultos mayores.

Tristemente, todavía falta mucho para que cada persona que supere los 70, 75 años, pueda tener condiciones dignas para disfrutar la última parte de su vida. No son pocos los casos en que se transforman casi en una carga para sus cercanos, sobre todo cuando son aquejados por enfermedades que en su mayoría son propias de su edad, de un proceso de desgaste lógico por el paso del tiempo.

Independiente de eso, con muchos también los que se mantienen activos, practicando deportes u otro tipo de actividades que les permiten relacionarse con gente de su misma edad e interés. Esto resulta fundamental, pues a veces surgen problemas que no tienen tanto que ver con lo físico, sino más bien con la soledad y falta de movimiento y relación con los demás.

Es de esperar que en el corto plazo se avance en ese sentido, y quienes llegan a la tercera e incluso cuarta edad puedan disfrutar de esta etapa .