Las lecciones y cambios que nos dejará la pandemia, la exitosa adaptación de académicos y estudiantes y sobre todo la importante labor de poner la ciencia y el conocimiento al servicio de la comunidad, son abordadas por el Rector de la UTFSM, Darcy Fuenzalida.
Francisco Martinic
director@ladiscusion.cl
No hay duda que la humanidad está aprendiendo grandes lecciones, a partir de una pandemia que nos marca una ruta de cambios que en otros momentos creímos imposibles y que, hoy pueden volverse parte de nuestros desafíos y prioridades para actuar.
Para el Rector de la Universidad Técnica Federico Santa María, Darcy Fuenzalida O´Shee, la pandemia nos ha enseñado a acortar distancias para interactuar y compartir ideas, gracias a la tecnología, mientras las universidades, sobre todo aquellas con vocación pública, han demostrado de manera contundente, cómo el conocimiento puede ser oportuno y pertinente al servicio de la sociedad.
“La Universidad Técnica Federico Santa María siempre ha puesto todas sus capacidades a disposición para dar respuesta a los desafíos del país. Somos una Institución de carácter público y con una marcada vocación solidaria y responsabilidad social, lo que ha impulsado a la comunidad universitaria a colaborar, desde nuestro quehacer y conocimiento, en la búsqueda de soluciones a los requerimientos que el país presente en el contexto de la compleja situación sanitaria producto del COVID-19.
Durante estos meses, diversos equipos de profesores, estudiantes y funcionarios de nuestros campus y sedes, han desplegado su potencial científico-tecnológico aportando con diversas iniciativas que abarcan desde la producción de implementos médicos como respiradores artificiales, protectores faciales y mascarillas, hasta el monitoreo de la contaminación atmosférica y su impacto en la propagación de la enfermedad”.
¿De esas diferentes iniciativas, cuáles destacaría?
Una de las primeras iniciativas que surgió dentro de la Universidad fue la fabricación de respiradores artificiales. Contamos con dos proyectos en esta línea: el primero, un ventilador mecánico de intubación endotraqueal, que actualmente está en fase de pruebas, y que usaría la línea de gas de los hospitales; un sistema de válvulas que estará conectado al paciente y que proveerá el ciclo de respiración. Este proyecto es uno de los cinco seleccionados por la Sofofa entre 35 que se presentaron en el país, y cuenta también con el respaldo de Corfo. Un segundo proyecto desarrolla un respirador que administra aire y oxígeno a través de una mascarilla, y que se caracteriza por ser de fácil implementación y bajo costo.
Hay equipos voluntarios de profesionales, académicos y estudiantes en nuestros FabLab que, en nuestros Campus y Sedes, se encuentran elaborando protectores faciales y mascarillas con el objeto de apoyar principalmente a hospitales y a la comunidad, donándose cientos de ellos a la fecha, proyecto que permitirá que se donen más de 10 mil protectores faciales a Hospitales y Centro de Salud de las regiones de Valparaíso, Biobío y Metropolitana, para luego distribuirse en todo el país.
A esto se suma la creación de un prototipo de caja de aislamiento para dar mayor seguridad al personal en el proceso de intubación endotraqueal en pacientes críticos y principalmente de enfermería y kinesiología de la UCI-COVID, en procesos de extubación.
En paralelo, se llevan a cabo diversas iniciativas como el diseño de una tórula que se puede desarrollar en Chile, para realizar exámenes de esta enfermedad, estudios respecto del comportamiento del virus a través de un modelamiento matemático y utilizando Inteligencia artificial y BigData, lo que permitirá prever las dinámicas de expansión y entregar información anticipada a las autoridades.
¿Cuán difícil ha sido para la UTSM adaptarse a la educación a distancia, la capacitación de sus profesores y conectividad de estudiantes?
Más allá de las normales dificultades que conlleva el proceso de adaptación a una nueva forma de enseñanza, ha funcionado bien. Todas las asignaturas se están impartiendo bajo esta modalidad y se ha registrado una alta asistencia por parte de los estudiantes, especialmente, los de primer año. Lo anterior, se debe en gran medida a que hemos logrado apoyar a nuestros estudiantes, principalmente a los de escasos recursos, con la entrega de becas de conectividad, que ha beneficiado a casi tres mil alumnos, principalmente pertenecientes a las sedes Viña del Mar y Concepción, y también con préstamos de computadores. Los estudiantes también han aprovechado sus beneficios, como la posibilidad de contar con grabaciones de las clases para repasar los contenidos y la oportunidad de incorporar nuevas metodologías de enseñanza y aprendizaje.
Igualmente, hemos apoyado a nuestros profesores en el uso de nuevas tecnologías, facilitándoles las herramientas necesarias para desarrollar su labor. A esto también se suma, el gran compromiso y disposición de todos en este proceso.
Por otra parte, y junto con acelerar el proceso de digitalización de los textos bibliográficos que son fundamentales para los programas de estudio, la USM ha dispuesto una mayor inversión y disponibilidad de recursos para el sistema de bibliotecas, lo que ha permitido beneficiar a cerca de 150 alumnos a lo largo del país, con préstamos de computadoras portátiles, que han sido entregadas en los domicilios de éstos, a través de la Dirección de Información y Documentación Bibliográfica Institucional del plantel.
Fuera de los aspectos técnicos de la educación y trabajo a distancia, que otro apoyo (sicológico, sanitario) a sus estudiantes y trabajadores (as) ?
Como Universidad hemos centrado todos nuestros esfuerzos en garantizar el bienestar de nuestra comunidad universitaria. A fines de febrero se inició una completa campaña informativa a fin de alertar a la comunidad sobre los riesgos de esta enfermedad y entregar recomendaciones para minimizar las posibilidades de contagio. A esto se sumó también la instalación de dispensadores de alcohol gel en cada uno de los Campus y Sedes de la Institución, el desarrollo de rondas preventivas, la suspensión de actividades masivas y el distanciamiento en espacios comunes. A partir de marzo, se implementó la modalidad de teletrabajo y para aquellos funcionarios que han dado a conocer algunas dificultades de conectividad, se contrató bolsas de datos mensuales.
A través de la Dirección de Recursos Humanos y la Dirección de Relaciones Estudiantiles, se han habilitados canales expeditos de comunicación y hemos desarrollado un completo plan de apoyo y atención para entregarles a nuestros profesores, estudiantes y funcionarios toda la ayuda y orientación que necesiten para enfrentar esta emergencia.
La Universidad también ha dispuesto apoyos especiales para aquellos estudiantes que acreditan situaciones muy complejas de convivencia en el núcleo familiar o presentan una severa disminución de su ingreso disponible. Estas circunstancias se analizan caso a caso, a la luz de los antecedentes que presenten.
A lo anterior, se suma el desarrollo de espacios de conversación, donde un grupo de estudiantes dialoga sobre un tema particular con un profesional del área, y también que las atenciones psicológicas y de asistentes sociales se llevan a cabo de forma online, resguardando la privacidad de los alumnos.
Se realizan constantemente recomendaciones a profesores, estudiantes y funcionarios a seguir aplicando las medidas de prevención y autocuidado, observar atentamente los protocolos emanados del Ministerio de Salud y acudir al centro de salud más cercano si presenta síntomas asociados al COVID-19 informando de inmediato, en el caso de los funcionarios, a la Dirección de Recursos Humanos, y los estudiantes a la Dirección de Relaciones Estudiantiles.
¿Le preocupa que los ajustes y reasignaciones de recursos fiscales que está impulsando Hacienda, afecten el desarrollo de proyectos de investigación o desarrollo de las Instituciones de educación superior?
El contexto que hemos tenido que enfrentar las universidades ha sido bastante complejo, ya que, desde el comienzo de la pandemia, nuestra política ha sido adaptar nuestro quehacer a nuevas modalidades, para así velar por el resguardo de la salud de nuestras comunidades. Hemos invertido nuestros propios recursos para enfrentar la emergencia, adquiriendo softwares para implementar el teletrabajo y las clases online, además de la entrega de becas de conectividad, apoyos a nuestros estudiantes y otros beneficios.
Las complicaciones financieras en las Universidades del CRUCH, se han generado producto del estallido social y la pandemia del COVID 19, y llevará a las Universidades a percibir menores ingresos por impactos en las matrículas y mayores costos debido a las medidas que se han tenido que abordar debido a la situación sanitaria, llevando a un impacto financiero de $146.739 millones.
Esta situación causará complejos impactos, es por eso que como consejo hemos propuesto una serie de medidas para enfrentar la difícil situación académica y financiera de nuestras universidades, siendo, en su mayoría, lamentablemente desestimadas desde el Mineduc. Uno de los aspectos que nos plantea mayor preocupación es la propuesta del Ministerio de estatizar los excedentes en dinero que se han acumulado en el Fondo Solidario del Crédito Universitario, gracias al aporte y gestión de cada una de nuestras universidades, lo que privaría a nuestros alumnos de poder disponer de estos recursos de sus propias instituciones.
Es importante expresar que el excedente del Fondo Solidario del Crédito Universitario es un patrimonio de cada una de las Universidades, por lo que es una legítima solicitud de que sean estas las que puedan hacer uso de ellos, para así implementar un apoyo para nuestros estudiantes y contribuir a enfrentar el déficit generado, permitiéndonos continuar con nuestro quehacer tanto académico, como formativo e investigativo, ya que las universidades somos una fuente importante de conocimientos y el 85% de la investigación del país, proviene de nuestras instituciones, por lo que esta crisis, además pone en riesgo la investigación, la innovación y las patentes que se generan para el desarrollo del país.
Superada la pandemia, nos vamos a enfrentar a una sociedad distinta y aun mundo que va a cambiar o va cambió ¿cómo se inserta la Universidad en esa nueva sociedad y en ese nuevo mundo?
Sin duda ya estamos presenciando un cambio en la sociedad, el que nos presenta una nueva realidad. Como Universidad nos encontramos viviendo hace ya un tiempo el trabajo online, encabezado por el quehacer de nuestros investigadores y hoy la pandemia del COVID-19, vino a acelerar el proceso de implementación del desarrollo de la modalidad virtual con estudiantes, profesores y funcionarios, a través del teletrabajo.
Este cambio, sin duda, se quedará en la comunidad y las Universidades en el futuro, tendremos mucha más actividad virtual en nuestro desarrollo natural, porque las exigencias han demostrado que estos medios aportan positivamente al quehacer. Sin embargo, una vez superada la pandemia, debemos comenzar a reactivar gradualmente las instancias de presencialidad y lo que veremos en el futuro, será una distinta forma de trabajo colaborativo, donde convivirá el trabajo virtual y el presencial en nuestro quehacer universitario.