Se trata de los trámites realizados ante el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (Inapi). “La Región del ha mantenido una participación estable en el registro nacional de marcas comerciales”, explicaron desde la entidad.
El Instituto Nacional de Propiedad Industrial (Inapi) es el ente encargado de consolidar el registro de emprendimientos consolidados y que buscan patentar sus ideas creativas.
En entrevista con Diario Concepción, Esteban Figueroa, director nacional (s) de Inapi analizó en detalle las preferencias de las empresas del Biobío y las ideas que buscan resguardar como identidad comercial.
– ¿Cuántas marcas se han registrado en el Biobío durante los últimos dos años?
-Durante los últimos dos años, la región del Biobío ha registrado un total de 1.605 marcas, lo que refleja un dinamismo significativo en la protección de signos distintivos.
En 2023, se alcanzaron 848 solicitudes de registro, mientras que, hasta la fecha, en 2024 se han protegido 757 marcas. Estas cifras demuestran el creciente interés por parte de empresas y emprendedores de la región en resguardar su identidad comercial y destacarse en el mercado.
– ¿Cuál es el porcentaje que inserta el Biobío al registro nacional de marcas?
-La región del Biobío ha mantenido una participación estable en el registro nacional de marcas comerciales durante los últimos dos años. En 2023, representó el 3,6% del total de registros a nivel nacional, mientras que en 2024 este porcentaje creció ligeramente, alcanzando el 3,8%.
– ¿Qué tipo de marcas son las más comunes en la región del Biobío?
– Las marcas pueden adoptar diversas formas, desde palabras o combinaciones de palabras (marcas denominativas y mixtas) hasta cifras, letras, símbolos, dibujos (marcas figurativas) e incluso signos auditivos, como las marcas sonoras.
También existen marcas no tradicionales, como las tridimensionales, olfativas, de patrón, multimedia, holográficas, de movimiento, de posición o táctiles, entre otras. La legislación chilena permite registrar signos distintivos más innovadores, incluidos olores, texturas y sabores, siempre que puedan representarse de manera clara, precisa y completa, y sean inteligibles y accesibles tanto para las autoridades como para el público.
En la región del Biobío, las marcas mixtas han sido las más comunes durante el último año, con 526 registros, seguidas por las denominativas, con 227. Más atrás se encuentran las marcas figurativas, con 3 registros, y una sola solicitud de marca tridimensional. Esto refleja una clara preferencia por las marcas que combinan elementos visuales y textuales.
– ¿Hay algún sector o industria que destaque en cuanto a registro de marcas en la región?
– En la región, los registros de marcas reflejan un claro predominio de ciertos sectores económicos que destacan por su dinamismo y diversidad. Durante los años 2023 y 2024, las principales clases registradas fueron la Clase 35, que abarca actividades de retail, compra y venta al detalle, administración de empresas y publicidad, seguida por la Clase 41, que incluye servicios de entretenimiento como ferias, competencias deportivas, conciertos y educación.
También se observa un importante número de registros en la Clase 42, vinculada al diseño de software, páginas web y servicios de investigación científica.
Otros sectores destacados incluyen la Clase 43, relacionada con restaurantes, hoteles y servicios de hospedaje, y la Clase 44, que agrupa actividades como servicios médicos, veterinarios y de cuidado personal, además de jardinería.
Este panorama evidencia un fuerte interés por proteger la identidad de marcas en sectores clave para el desarrollo económico y social de la región.
– ¿Qué beneficios ofrece el registro de una marca para las empresas o emprendedores de la región?
– Registrar una marca es una herramienta clave para proteger la identidad comercial de cualquier emprendimiento o empresa. Este registro no sólo otorga exclusividad sobre su uso en el mercado chileno, sino que también proporciona una base sólida para expandirse a mercados internacionales, gracias a sistemas como el Protocolo de Madrid.
Además, una marca registrada es un activo intangible que aumenta el valor de las empresas, permitiendo estrategias comerciales como licencias o franquicias. En definitiva, proteger una marca es proteger la inversión, la innovación y la confianza que los consumidores depositan en los productos y servicios.
– ¿Cuál es el objetivo y las proyecciones de Inapi en la economía del Biobío para este 2025?
– En nuestro constante esfuerzo por acercar la propiedad industrial a emprendedores, innovadores, universidades, centros de investigación y el ecosistema en general, Inapi fortalecerá sus líneas de acción vinculadas con asesorías personalizadas, transferencia de conocimiento a través de talleres y capacitaciones, y la creación de contenido como tutoriales y guías.
Estas acciones tienen como objetivo facilitar el acceso a los recursos y herramientas que promuevan la innovación en todo Chile. En este contexto, un avance fundamental es la modernización de nuestra plataforma, que permite el acceso a todos los servicios en línea desde cualquier lugar del país.