Gobierno y actores regionales se reunieron en Santiago. Durante este próximo mes debe estar terminado el plan de impulso económico para mitigar el impacto tras el cese de la usina.
Por E. Bascuñán / K. Gonzalez
El tema que marcó la jornada de reuniones entre dirigentes sindicales del Biobío y el Ministro de Economía, Nicolás Grau, volvió a ser la complicada situación de los contratistas de la Siderúrgica Huachipato y los dos enfoques en los que se articula el plan de impulso económico en el Biobío. Es que en una última reunión en Concepción, hace algunas semanas, este tema ya había sido ampliamente abordado.
El Ministerio de Economía expuso los lineamientos generales de esta iniciativa, los cuales son atender con urgencia la situación de las empresas afectadas por el cierre de la usina, y por otro, desarrollar medidas de largo plazo para el fortalecimiento industrial de la zona.
En este contexto, Nicolás Grau, señaló que “ahora, esta articulación entre sindicatos, gobierno regional, empresarios del Biobío y académicos enfrenta una tarea aún más compleja y urgente a raíz del cierre de Huachipato. Seguiremos trabajando juntos para impulsar un desarrollo económico que responda a las necesidades inmediatas de la región y que, a la vez, siente las bases para un futuro industrial moderno y próspero”.
Iván Montes, vocero de la Mesa por la Defensa del Empleo y la Industria Regional, presente en la instancia de este viernes en Santiago, afirmó que del plan de impulso económico “no se dijo nada, sólo que aún está en proceso de construcción y que eventualmente tendremos medidas más concretas al respecto”.
El gran tema de conversación y lo que tomó más tiempo, según Montes, fue el efecto del cierre de la usina en las empresas proveedoras. “Se habló mucho sobre cómo contener el efecto de cierre de una empresa tras otra”, afirmó.
“Nos están pidiendo que tengamos un poco más de paciencia, porque también obviamente sesionamos acá en Santiago, y pronto vamos a esperar una sesión en el Biobío. Ya el ministro se comprometió a que sí o sí, debe haber algo durante septiembre”, enfatizó el dirigente.
Hay que recordar que los trabajadores directos ya se encuentran realizando conversaciones con los dirigentes para coordinar una salida. El sector complicado en ese sentido, serían los contratistas, o sea, trabajadores indirectos y proveedores de la usina.
“Este va a ser entonces, el apoyo que les va a prestar el Gobierno. Ahí está involucrada la Corfo, la Subsecretaría del Trabajo, quienes ya se han contactado con la mayoría de las empresas propias de Huachipato para ir coordinando acciones para el futuro”, afirmó Montes.
El representante de la Mesa por la Defensa del Empleo aseveró que “solicitamos que, lo antes posible, se generen acciones también para que los trabajadores que van a quedar cesantes en este proceso de cierre tengan la posibilidad de buscar alternativas laborales, y de eso también se habló de una feria laboral, del más alto nivel, que se debería realizar prontamente en la región”.
Por su parte, Iván Valenzuela, administrador regional quien también estuvo en la reunión, afirmó que se “hizo una presentación en la situación que estamos y algunos desafíos futuros, y hemos acordado trabajar en conjunto con medidas de corto, mediano y largo plazo que vayan en defensa del empleo, de generación de nuevos puestos de trabajo”.
Héctor Medina, presidente del Sindicato 1 de trabajadores de Huachipato afirmó que “es una preocupación de parte de las autoridades, particularmente de la crisis de Huachipato, de los efectos que esta crisis va a tener puntualmente en las empresas proveedoras”.
Medina enfatizó respecto de la urgencia industrial y los cierres de industrias en el Biobío. “Necesitamos salir del rezago y de la condición que hoy día tenemos, que es una condición que si no la detenemos y no cambiamos la orientación de este vector, vamos a seguir cayendo y se van a seguir cerrando industrias y perdiendo puestos de trabajo en la región”, sostuvo.
Cabe indicar que en la sesión, participaron representantes de los ministerios de Economía y Trabajo, Corfo, Sistema de Empresas Públicas – SEP, CPC Biobío, Sindicatos 1 y 2 de Huachipato, Gobierno Regional del Biobío, Sindicato ENAP, Sindicato Celulosa Arauco, Sindicato de Tripulantes Pesqueros Biobío, Unión Portuaria Biobío y Festramet.
Vale recordar, que hace menos de un mes se anunció el cierre definitivo de las operaciones siderúrgicas de Huachipato, generando un alto impacto en la Región del Biobío y en la complicada situación industrial de la región.
La crisis desatada por la competencia del acero chino terminó, según los altos cargos de la usina, declarando dos veces el cierre durante este año. Aún así, la labor sindical y un transversal apoyo político, entregó esperanzas sobre la situación laboral de más de 22 mil trabajadores, que directa o indirectamente hacían funcionar las operaciones siderúrgicas en Talcahuano.
Tras esto es que CAP informó a la Comisión para el mercado Financiero sobre el Hecho Esencial, mientras que la Compañía Siderúrgica Huachipato desistió de continuar con la revisión de las sobretasas ante la Comisión Antidistorsiones.