En el global, en el Biobío, durante el primer semestre se emitieron 365 mil de estas autorizaciones.
El aumento en la emisión de licencias médicas en la región del Biobío sigue el comportamiento nacional. Lo anterior considerando tanto causas generales como laborales, como lo afirmó la superintendenta de Seguridad Social, Pamela Gana Cornejo.
En entrevista con Diario Concepción detalló algunas cifras regionales y abordó la situación de salud laboral de los trabajadores de Huachipato, entre otros.
-¿Cómo se han comportado las cifras regionales sobre licencias médicas?
– Aquí, separemos el mundo de la salud en dos partes. Una es la Salud Laboral donde el típico dato es que del total de enfermedades el 68% son de salud mental y la Región no se queda atrás.
En el mundo de salud común (las licencias no laborales) tenemos que las licencias médicas efectivamente han ido creciendo en el tiempo, y ese crecimiento se refleja especialmente desde la pandemia que se quedó, en que un tercio del total licencias médicas que son otorgadas por profesionales de la salud, aparte de todo lo laboral, son de salud mental y en la Región es parecido en cuanto números relacionados a los porcentajes.
Son cifras que en realidad no cambian mucho en relación al nivel país. La región del Biobío tiene casi 815 mil licencias médicas otorgadas en total entre enero A diciembre de 2023, y a junio de este año 2024, van casi 365 mil.
-¿Hay alguna política pública orientada a disminuir las licencias falsas?
– Se está trabajando hoy día, por ejemplo, en lo que es salud mental, en nuevas directrices para la emisión y contraloría de licencias médicas por parte de nosotros, también estamos haciendo procesos de fiscalización e investigación a médicos, sobre todo, los que cambian de comportamiento. Casos que emiten altos números de licencias médicas, fueras de horarios u horarios extraños, cosas que se pesquisan para investigarlas. Además, hay un proyecto de ley que se está discutiendo en el congreso y que esperamos se apruebe luego para contar con sanciones mayores.
– ¿Ha incidido de alguna manera en las cifras que analiza la SUSESO la mayor contratación de extranjeros en el país y la Región?
– En los accidentes laborales hubo un tema cuando entró un grupo importante de trabajadores haitianos y cómo se comunicaban con ellos, porque en seguridad y salud del trabajo es muy importante cómo comunicar los riesgos, que se tenga conocimiento de ellos y cuáles son las medidas preventivas, entonces, estaba esta brecha comunicacional por el idioma que es un tema en que las mutualidades comenzaron a desarrollar algunas acciones en creolé para poder abordar esa brecha.
– ¿Cuáles son las consultas que más realizan los trabajadores a la SUSESO?
-Principalmente somos la última instancia de reclamación administrativa mayoritariamente de licencias médicas rechazadas que siguió la ruta de otorgamiento, rechazo del asegurador (Isapre o Compin) donde el trabajador tiene derecho a reclamar. De las 200 mil reclamaciones que recibimos al año, como un 70% son por licencias médicas rechazadas o reducidas y otros 10% de esos 200 mil , son por salud laboral, que es principalmente, calificación de origen de enfermedad.
-¿Tienen mediciones de cuánto tardan en responder las consultas de las personas trabajadoras ?
– Estamos en un proceso de mejora de reducción de stock de casos sin responder y esperamos que en diciembre podamos emitir algún informe que sea bastante más auspicioso de lo que hoy día estamos y de lo que queremos.
-Sobre la situación de la Compañía Siderúrgica Huachipato, ¿qué condiciones de salud y trabajo pueden exigir los trabajadores que serán desvinculados de la empresa en poco tiempo más?
-Como cualquier trabajador, sea de Huachipato u otra empresa, el empleador siempre tiene la obligación que está consagrada en nuestro Código del Trabajo de realizar todas las acciones eficientes y efectivas para un entorno sano y seguro, por lo tanto, eso ocurre hasta el último día en el cual el trabajador se está desempeñando en una empresa.
Además, existen obligaciones más allá del empleador, de los organismos administradores que administran el seguro social de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales, entiéndase las mutualidades y el Instituto de Seguridad Laboral (ISL), que tiene obligaciones en algunos casos, cuando se dan exposiciones a algunos riesgos específicos, de hacer vigilancia a la salud posterior, de hacer seguimiento del estado de salud de los trabajadores pero son para casos normados por el Ministerio de Salud. Habría que ver si existen esos riesgos y, por lo tanto, después sigue la obligación, si es que existieran, con la mutualidad.
-¿Puede ser la doble presencia un factor de riesgo considerando, por ejemplo, variables de altas temperaturas como en los altos hornos que ocupa Huachipato o por labores en alturas?
-El tema de la doble presencia es un riesgo psicosocial que tiene que ser gestionado y es parte de cualquier riesgo que debe gestionar correctamente un empleador. Otro tipo de riesgo, sean de temperaturas, químicos, biológicos u otros, también tienen que seguir un procedimiento de gestión de esos riesgos, es decir, en Huachipato o cualquier empresa, en lo que el proceso de gestión de riesgo adecuado está en que el empleador tiene que ser capaz de, primero, hacer un levantamiento de cómo se realiza el proceso productivo o la entrega de un servicio; segundo, identificar cuáles son los peligros asociados a esos procesos; tercero, cuáles son los riesgos, medir la probabilidad de ocurrencia y el daño que puede generar, entre otros. Y cuarto, establecer medidas preventivas que vaya a la base de la causa que pueda originar ese riesgo y, obviamente, una mejora continua permanente de esa revisión.
-¿Cómo se puede proteger la salud mental de trabajadores que se encuentran hoy día negociando la salida de su empresa?
-Hay que referirse también a la protección de la salud mental en general, porque hoy día es algo muy relevante, entendiendo que, del total de enfermedades profesionales y reconocidas como laborales en el país, en 2023, el 68% fue por salud mental y en Biobío es parecido, un poco menor, pero también está por sobre el 50%.
Por lo tanto, hay un tema que hay que proteger y gestionar, más que cuando alguien se enferma hay que darles las prestaciones médicas económicas, el tema es cómo ponemos en el centro la prevención de riesgos. Y en ese sentido, prevenir el daño a las personas trabajadoras. En el ámbito de la salud mental está establecido, primero, medirlo, seguir el mismo proceso, identificarlo, medirlo y se gestiona el establecimiento de medidas preventivas. Hace ya harto tiempo, desde 2014, es obligación en Chile a través de un protocolo que estableció el Ministerio de Salud, que es el protocolo de vigilancia de riesgo psicosocial en el trabajo, que se debe hacer este proceso y se debe partir por hacer una medición de esos riesgos que se hace a través del Cuestionario de Evaluación Ambientes Laborales en Salud Mental, más conocido como SEALSM de la SUSESO (Superintendencia de Seguridad Social).