Dueños de restaurantes optan por sobreabastecimiento o cierre de locales en la costa regional

05 de Junio 2024 | Publicado por: Catalina Ulloa
Fotografía: Raphael Sierra P.

Las condiciones del tiempo son de lluvia, fuertes vientos y marejadas para estas próximas horas. Lo anterior dificulta el trabajo de los pescadores, y con ello, como efecto en cadena, el de los recintos de comida marítima.

Las condiciones del tiempo son de lluvia, fuertes vientos y marejadas para estas próximas horas. Lo anterior dificulta el trabajo de los pescadores, y con ello, como efecto en cadena, el de los recintos de comida marítima.

Marejadas, fuertes vientos y lluvias abundantes es el pronóstico que afectará a la Región del Biobío durante estas próximas horas, tema que mantiene en estado alerta a los pescadores y dueños de restaurantes de perfil marino del Biobío.

Botes amarrados y compras anticipadas, son algunas de las medidas que se han tomado en la zona con el fin de capear el sistema frontal que, en algunos sectores, obligaría a los dueños de restaurantes costeros a cerrar sus locales.


Como informó Diario Concepción, desde el Centro Meteorológico Marítimo de Talcahuano, la Armada entregó un aviso de marejadas que abarca desde el Golfo de Penas hasta Arica, entre los días 4 y 8 de junio. Este fenómeno oceánico, producido por los fuertes vientos, se desatará debido al frente de mal tiempo, el cual se inició desde el pasado lunes y se extenderá hasta el 5 de junio.

Preparación previa al temporal


En Talcahuano, específicamente en Caleta Tumbes, Lugarda Cerna, presidenta de Locatarios de Restaurantes de la caleta y administradora del local Aires Marinos, mencionó que los pescadores y los habitantes del lugar se han preparado para no tener dificultades durante los días en los que se pronosticó el frente y marejadas, cuestión que en la mayoría de los casos trae consigo dificultad en los zarpes o bien un cierre de puertos.

De hecho, al cierre de esta nota, la Gobernación Marítima de Talcahuano mantenía la prohibición de operaciones sólo a embarcaciones artesanales dentro y fuera de la bahía. Estado que podría variar a cierre completo, para todo tipo de naves, una vez que se registren vientos sobre los 25 nudos (46 kilómetros por hora).


“Desde el lunes que se están reforzando las amarras de las embarcaciones y se han varado los botes. Por otro lado, se ha visto que las personas se han surtido de mercadería para sus casas, además de linternas y velas, ya que, probablemente, tengamos cortes de luz”. Como una medida extra de seguridad, la dirigente aseguró que, mientras las condiciones meteorológicas no lo permitan, “no podemos trabajar con el tiempo malo, porque, como es lógico, los visitantes no vendrán a la caleta, por lo tanto, los restaurantes se mantendrán cerrados hasta que se detenga el temporal. Pero, en caso de que el temporal sea suave o no llegue hasta acá, los locales se abrirán de acuerdo a cómo lo decidan sus dueños”.

Ubicado en el sector La poza de Talcahuano, la bentoteca Mar y Sol, ya se encuentra prevista de mercadería para funcionar, aseguró Silvia Sepúlveda, dueña del local, quien, en vista de las malas condiciones meteorológicas que se avecinan, se preparó con todo lo necesario para mantener abierto con normalidad.


“Para no quedar desabastecidos compramos productos congelados, pero lo justo y necesario, ya que pensamos que, por las fuertes lluvias, no habrá mucho público. Ya hemos trabajado con estas condiciones climáticas, así que no es una gran sorpresa para nosotros”. Además, al igual que en otros lugares, Sepúlveda aseguró que, en el puerto pesquero de Talcahuano, también se amarraron y aseguraron las embarcaciones.

Por otro lado, en Dichato, el mar en calma, previo al frente de mal tiempo pronosticado, fue la ocasión perfecta para pescar y obtener mariscos según José Mora, administrador del restaurante Don Mino, pues, según aclaró que, “antes de que se desate un frente, los pescadores artesanales tienen desde 24 a 40 horas para trabajar, pues, es común que se den las mejores condiciones para la pesca y el buceo, ya que corre viento norte y el agua se vuelve más clara y calma”.


En cuanto a abastecimiento, Mora aseguró que los locales se han abastecido con anticipación con productos recolectados en la propia caleta. “Los muchachos aprovecharon los dos días de buen tiempo, acá en Dichato y en Cocholgüe, de pescar y mariscar, principalmente, machas, piures, jaibas, además de congrio y merluza”.

Bajos recursos marinos


“No es una situación fuera de lo común”, aseguró la presidenta de la Asociación Gremial de Mujeres de la Pesca Artesanal del Biobío, Sara Garrido, quien comentó que en caleta Coliumo, donde habita, no se sorprenden por el mal tiempo, ya que es algo que sucede año tras año.

“Los pescadores artesanales de la zona ya se están preparando para el temporal, asegurando tanto grandes como pequeñas embarcaciones a bordo, pues, como mencioné, no es para nada extraño que ocurran este tipo de fenómenos meteorológicos”.


Lo más preocupante, según opinó la dirigente, son los estragos que las malas condiciones meteorológicas pudiesen provocar alrededor. “Lo que más nos afecta y, que se nos escapa de las manos son las consecuencias a las poblaciones, como, por ejemplo, los daños que podrían provocar interrupciones en los servicios de luz y agua, los cortes de caminos, la falta de conectividad y las caídas de árboles”.

En cuanto a surtimiento, Sara Garrido lamentó que, en Coliumo, la realidad en cuanto a la obtención de recursos marinos no es favorable, ya que, según indicó, “este año ha estado pésima la pesca artesanal y está afectando fuertemente la situación económica de los pescadores, pues, aparte de la baja de peces y otros recursos, con el temporal y las marejadas, menos podrán salir a trabajar. No existe ningún tipo de mitigación social que aminore un poco los impactos que puedan ocurrir en la comunidades y sobre todo en aquellas caletas que son más vulnerables que otras”.