Por Bruno Rozas Hinayado

La producción de pellet ha estado envuelta en incertidumbre desde el 2022, cuando se registró una notoria escasez del combustible, lo que derivó que ese invierno estuviera marcado por las imágenes de largas filas de personas afuera de los locales de distribución. Incluso en algunos casos llegaron a madrugar para lograr comprar este elemento, lo que llevó a que en algunas regiones del país se racionara su venta.

Ahora, en la edición del reciente 15 de enero de Diario Concepción, Daniela Espinoza, Seremi de Energía en el Biobío, señaló que “está bastante sano el mercado y las plantas están produciendo de forma normal, están anticipándose a todo esto”.

“En  2023 tuvimos, entre enero y septiembre, un 48% más de producción con respecto a todo el año 2022 y esperamos que este año se mantengan estos niveles de producción, porque hasta ahora no hemos tenido ninguna alerta de alguna planta que haya dejado de producir o que tenga problemas”.

Según el Instituto Forestal (Infor), dependiente del Ministerio de Agricultura, la Región del Biobío es la mayor productora de este combustible, dado que ha aumentado en forma constante su tasa de producción, generando en promedio cerca del 70% de la producción nacional.

Esto tiene directa relación con la cantidad de empresas que se dedican a este rubro. De hecho antes de la pandemia, en febrero de 2020, Biobío registraba 7 de estas plantas de un total de 23 a nivel país, es decir: el 30,4%.

Antonio Minte, gerente general de la Asociación Chilena de Biomasa, comentó a raíz de lo anterior, que “en cuanto a la producción de pellet, estamos terminando un muy buen periodo 2023, superando la producción del año anterior en más de un 15%”.

“Si bien, veníamos con números mucho más altos, cercano casi al 40%, hubo una disminución en la ventas que afectó a la producción e hizo que se soltara el acelerador, por así decirlo. Pero terminamos el año con todo muy estabilizado y sin ningún problema”, aseguró.

A nivel nacional, para este 2024 existe un stock de más de 55 mil toneladas de pellet, lo que representa un incremento de 50% con respecto a cómo se inició el 2023, según datos de la Asociación Chilena de Biomasa.

Viviana Acevedo, gerenta comercial de Industria Nacional de Pellet (INNAPEL), ubicado en Talcahuano, comentó que “para el 2024 estamos incrementando en un 54% la línea productiva llegando a un volumen de 28 mil toneladas anuales”.

Escasez de Pellet

En el marco de la pandemia de Covid-19 ocurrida entre el 2020 y el 2022, muchas personas tuvieron que permanecer en cuarentena en sus hogares, lo que significó que gran parte de los trabajadores cumplieran sus labores desde sus casas.

Con esto, el consumo de calefacción a pellet se disparó, lo que tuvo como consecuencia que se registrará una insuficiencia del combustible.

“Es muy difícil que vuelva a ocurrir una pandemia que suba el consumo más de un 40% de la noche a la mañana, y que provoque las dificultades que tuvimos en esos años. También es complicado que exista una carencia de materia prima y que la industria del pellet no pueda producirlo. Se ha mejorado la tecnología, desde el secado y hasta producción desde tronco, que podría sanar esta problemática de falta de materia prima”, manifestó Antonio Minte.

Para el funcionamiento de las estufas que utilizan pellet para su combustión, el promedio de consumo es de 1 kilo por hora. Los factores de cada familia o lugar en que se encuentran, al igual que las dimensiones del espacio, determinarán el costo del consumo.

“Nuestros clientes pueden estar tranquilos porque tendremos el stock necesario para satisfacer sus necesidades, y al mismo tiempo mantenemos los precios (…) contamos con presencia en Biobío, Ñuble, La Araucanía y Los Lagos, sin embargo queremos seguir expandiéndonos. En cuanto a materia prima contamos con abastecimiento asegurado con 10 proveedores de biomasa ”, detalló Viviana Acevedo de Innapel.