Cerca de 115 embarcaciones artesanales de la Región están operando para extraer las 16.600 toneladas de jurel correspondientes a la cuota cedida desde China. Dirigenta pide destinar a seguridad alimentaria.
Tanto el Gobierno como el sector de la pesca artesanal e industrial de la región del Biobío valoraron positivamente el inicio de la nueva temporada de la pesca del jurel en la zona.
Son cerca de 115 embarcaciones artesanales de la Región las que están operando para extraer las 16.600 toneladas de jurel correspondientes a la cuota cedida desde China.
Javier Sepúlveda, seremi de Economía, Fomento y Turismo de Biobío detalló que en la presente temporada de pesca de la cuota de jurel que fue transferida desde China a Chile, “son cerca de 115 embarcaciones artesanales de la Región las que están operando para extraer las 16.600 toneladas de jurel”.
En este sentido, el jefe de la cartera de Economía en Biobío, destacó que “esto es importante porque corresponde a una cuota adicional, no contemplada en la cuota regular que anualmente se asigna de acuerdo con la ley. Además, es importante porque, permite al sector de la pesca, seguir siendo un gran polo de desarrollo en la Región, con un fuerte empleo local y aumento en la producción regional”.
Otro punto relevante para Javier Sepúlveda, es que “la pesca es la segunda actividad, en términos de exportaciones, por lo tanto, esto permite seguir llegando a mercados internacionales con productos regionales”.
Por su parte, Sara Garrido, presidenta del Sindicato de Trabajadoras Artesanales de la Caleta de Coliumo y de la Asociación Gremial de Mujeres de la Pesca del Biobío confirmó que es una cuota proveniente de China y que “los artesanales lo ven como una oportunidad. Ahora, esto también es positivo porque al haber un aumento de la fracción, se garantiza que los artesnales serán capaces de pescarlo”.
La dirigenta indicó además que “están dadas las condiciones, por lo tanto, esta vez, ganan los artesanales, pero triplica las arcas industriales”.
Sara Garrido aprovechó la oportunidad para manifestar su posición frente a rol que debería tener la pesca artesanal del jurel respecto a la seguridad alimentaria, ya que “deberían, al menos, exigir, en este tipo de cuotas, tanto chilenas como de otros países, que la captura del jurel sea destinado completamente al consumo humano y no dirigido a la producción de harinas”.
Desde el sector industrial, Monserrat Jamett, gerente de Sustentabilidad de Pescadores Industriales del Biobío señaló que “estos traspasos de cuota china de jurel ORP son el resultado de un ejercicio de colaboración público- privada, entre la Subsecretaría de Pesca, la pesca industrial y la artesanal, que tendrá solo un efecto social para la actividad pesquera artesanal, ya que el destino de la captura será harina y aceite de pescado, no pudiéndose elaborar productos para el consumo humano. Es importante avanzar hacia los permisos individuales de la pesca artesanal, para el fomento del consumo humano”.
Cabe recordar que la nueva temporada del jurel se da en un contexto de veda de la merluza común que se suma con otro escenario. Fue así como, desde Ferepa Biobío dieron cuenta de una amplia caída en la captura del recurso respecto al 2022.
En esta línea, Pablo Cofré, presidente de la Federación de Pescadores Artesanales de la Región del Biobío (Ferepa) señaló que “este año ha sido sumamente crítico lo ocurrido con la merluza común porque no se ha pescado nada y quienes se dedican a esta pesca no han salido hace bastante tiempo a trabajar. En relación al año pasado hay cerca de un 80% menos de pesca de este recurso”, concluyó.