Productores califican de “avance” nueva ley de uso de aguas grises para agricultura

Uso de agua potable se podrá reducir en un 30% en la pequeña actividad. Cambio apunta a sector silvoagropecuario, excluyendo cultivos a ras de suelo de frutas y hortalizas.

Luego que por unanimidad la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó las modificaciones hechas por el Senado, al proyecto que modifica la Ley 21.075, El texto quedó listo para su promulgación como ley donde se regula la recolección, reutilización y disposición de aguas grises, para fomentar su reutilización en la agricultura.

Ante eso es que tanto productores, como desde la academia de la Región del Biobío catalogaron como “un avance” esta medida.

José Miguel Stegmeier, presidente de la Sociedad Agrícola de Biobío (Socabío) expresó que “en varios países es viable regar con aguas llamadas grises, al respecto Israel es el pionero. Tal como está concebida la ley en el caso chileno, su efecto será muy acotado, ya que están consideradas con un uso a una escala muy reducida. Sin embargo, es un avance”.

“Acá lo más importante es que realmente su uso sea seguro en cuanto a eventuales contaminaciones ya sea respecto de los productos que se cosechen y también del propio suelo. Lo mismo respecto de que quienes rieguen con estas aguas, tomen las suficientes precauciones en su uso”, agregó Stegmeier.

Valentina Carrillo, Ingeniera Civil Ambiental, Doctora en Ciencias Ambientales con mención en Sistema Acuáticos Continentales e Investigadora postdoctoral CRHIAM y del Grupo de Ingeniería y Biotecnología Ambiental (GIBA-UDEC) de la Universidad de Concepción, explicó que las aguas grises corresponden a “aquellas que no son ‘oscuras’ que vendrían siendo como las del inodoro. Son todas aquellas usadas en los domicilios como las del lavavajillas, en la cocina; lavamanos, la ducha y lavadora de ropa del baño, en general se llaman aguas grises porque no traen las aguas oscuras”.

En cuanto a los principales ventajas asociadas a la modificación de la ley, la investigadora de la UdeC, apuntó a que “más que nada tiene que ver con el uso agrícola, más bien del uso en sector silvoagropecuario ya que generará un avance en la reutilización de aguas por parte de pequeños agricultores para el riego de árboles, cereales y cultivos industriales, algunos tipos de viveros u ornamentales como la producción de flores, salvo en el caso de frutas y verduras a ras de suelo o que se consumen generalmente crudas”.

Escasez hídrica

Entre los avances vinculados a la nueva normativa sobre el uso de aguas grises en la agricultura, Valentina Carrillo dijo además que “esto trae un gran avance respecto de la escasez hídrica reduciendo un 30% el agua potable que se usa por parte de pequeños agricultores porque hay muchos agricultores que se han quedado sin sus pozos y sus fuentes de agua. Hay que recordar que van casi 13 años de escasez hídrica en Chile con 277 comunas afectadas con emergencia agrícola por la sequía en el país y en Biobío son 33 las que podrían verse beneficiadas”.

Respecto de los principales desafíos, la Doctora en Ciencias Ambientales con mención en Sistema Acuáticos Continentales de la UdeC manifestó que “traen un desafío muy grande en cuanto al uso de nuevas tecnologías, ya que se trata de aguas que deben tener algún tipo de tratamiento. Por ejemplo, de sedimentación, filtración u otro proceso donde un gran desafíos son los incentivos económicos para el uso de tecnologías en el sentido de promover inversión en este tipo de riego”.

A su vez, resaltó que en el ámbito de la construcción e implementación del usos de aguas grises se necesita separar las aguas residuales de inodoros lo que implica un gran desafío en el área de las obras públicas y en construcción y por otra parte para la fiscalización.

Otro punto relevante para la especialista es que “la Cámara de Riego podrá contar con fondos destinados para estos sistemas de reuso que podrán ser implementados, entonces, esta ley es un gran avance para utilizar nuevas fuentes de agua”.

Fabiola Lara, seremi (s) de Agricultura señaló que “como Gobierno se está avanzando en todas las medidas que sean necesarias para hacer frente a la crisis hídrica. Y, precisamente, el fomentar el reuso de las aguas grises, en especial en la pequeña agricultura, manteniendo las medidas preventivas para que no signifique un riesgo para la salud, es fundamental y habilitará a los distintos organismos de la administración del Estado para potenciar este tipo de proyectos”.

En esta línea, Lara resaltó también que “podremos entregar nuevas fuentes de aguas a quienes las necesitan con urgencia, que son los agricultores de nuestro país, que se han visto fuertemente afectados por la crisis climática y sus efectos en la situación hídrica del país”.