La Asociación de Corredores de Propiedades se refirió al escenario tanto de residencias como de locales comerciales. El pago en UF o reajuste por IPC es factor importante, advierten desde las tiendas del centro de Concepción.
Por Marcelo Vega Montenegro
Los precios en la venta y arriendo de departamentos continúan siendo elevados en el Gran Concepción. Una situación que comenzó desde el año 2020 con el inicio de la recesión económica provocada por la pandemia. Pese a que esta emergencia sanitaria ya finalizó, desde el rubro del corretaje de propiedades indican que estos precios se han mantenido, en parte, debido a que parte del sector inmobiliario aún no consigue adaptarse al contexto económico actual.
“Durante la pandemia, en el caso de la variación del precio de los departamentos, los arriendos subieron alrededor de entre 30% y 35 %. Un apartamento que costaba $250 mil pasó a estar evaluado en $320 mil”, comentó Cristian Jahr Señoret, director de la Asociación de Corredores de Propiedades.
“En esos años, hubo mucha demanda y poca oferta, eso se manifestó en el aumento de los precios. En la actualidad es todo lo contrario, ahora hay mucha oferta y poca demanda, ya que hay pocas personas que estén dispuestas a cambiarse. Los precios comenzaron a normalizarse el año pasado y hoy puede verse en las mismas publicaciones que hay menos consultas y menos gente buscando”, señaló Jahr.
Pese a esta situación, el presidente de la Asociación de Corredores afirmó que esta clase de situaciones son cíclicas y comunes en los mercados económicos. “Si bien ha ocurrido una pandemia y un periodo de efervescencia social, ya hemos pasado otras crisis y cuestiones extremas. En momentos como estos, no cuesta nada aumentar los precios, obviamente es un beneficio, pero cuando el mercado se regula hacia abajo, algunos miembros del sector se resisten a entender que hay que bajar los precios y eso es lo que ha sucedido en esta oportunidad”, sentenció.
En cuanto al precio de arriendo de los locales comerciales, específicamente en el centro de Concepción, Jahr señaló que los precios aumentaron debido a la desvalorización que sufrieron durante el Estallido Social y la emergencia sanitaria.
“Muchos locales tuvieron que cerrar o reinventarse y eso obviamente afectó a todos los arrendatarios. Desde el 2022 en adelante, los locales comerciales están volviendo a la normalidad. Estamos hablando de espacios que costaban $1 millón y que recibieron una baja de 50 % en el periodo más crítico, ahora han retomado parte de su valor y existe una mayor demanda”, comentó.
La óptica de Ricardo Vidal lleva funcionando por 17 años en la galería Palet, se le permitió mantener su local abierto durante la pandemia. “Las ventas disminuyeron alrededor de un 50 %, desde entonces las hemos recuperado un poquito, alrededor del 10 %”, afirmó.
Al ser consultado sobre si debió aumentar los valores durante ese periodo, aseguró que mantiene como principio un estándar de precios y que no los cambiará, independientemente de que sí se encontraba atravesando un mal momento.
En cuanto a las variaciones que ha tenido que afrontar desde el año 2020, afirmó que están dentro de lo que él ya espera. “El arriendo es variable porque depende de la Unidad de Fomento (UF), así que hay veces en que sube, otras veces no lo hace”, aseguró.
Marlen Zapata ha trabajado en este rubro por alrededor de 8 años. Mudó su local comercial a la galería Musalem en el año 2019. En relación con las variaciones del precio de los arriendos, aseguró que han aumentado bastante. “En la pandemia, los arriendos estuvieron paralizados por un tiempo. Pero después de eso, comenzaron a subir, de un mes para otro incrementaron mucho”, comentó.
Una situación que no le parece fuera de lo ordinario, sin embargo, para ella el problema resulta ser que los ingresos que recibe cada mes no son los óptimos. “Las ventas han sido muy bajas, mientras que los arriendos aumentan cada vez más. A mí me gusta mucho el local, esta es una de las galerías que más público tienen, pero las ventas no están. Esto le pasa en general a todo el comercio”, comentó.
En el caso de los locales de la icónica y emblemática galería Alessandri, estos son espacios que el Ministerio de Bienes Nacionales ha arrendado a los locatarios. “En este edificio han podido desarrollar por años sus actividades comerciales”, afirmó Eduardo Pacheco, seremi de Bienes Nacionales del Biobío.
“Tras el estallido social, y en medio de la pandemia, se evaluó el valor de los arriendos, atendiendo las dificultades de uso de las instalaciones. Por ello se redujo el valor y se brindaron facilidades para el pago de las morosidades”, señaló el jefe de cartera regional de BB.NN.