Desde el Ministerio del Trabajo señalaron que la cifra es preocupante para el escenario laboral en la Región. Asimismo, explicaron que es un obstáculo para que las personas puedan acceder a capacitaciones o certificaciones.
De las 690 mil personas ocupadas de la Región del Biobío, un 34,8% no ha terminado su escolaridad, registrando su enseñanza media incompleta. Esto según información proporcionada por el Termómetro Laboral Biobío que elabora el Observatorio Laboral del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence) con datos del trimestre de abril-junio de 2023.
“La misma sorpresa nos hemos llevado nosotros cuando hacemos el levantamiento de información en terreno en las comunas en las cuales hay más rezago. De la experiencia que hemos tenido, por ejemplo, hemos hecho levantamientos en cañete, ya hemos hecho dos en comunidades indígenas, y no hemos encontrado en el primer levantamiento que hicimos con 120 personas de las cuales 65, el 50%, no tenía la enseñanza básica o media terminada. Eso es alarmante”, detalló la Seremi del Trabajo y Presión Social en el Biobío, Sandra Quintana.
En la comparativa, la cifra ha bajado desde el 2019, ya que hace cuatro años la tasa de ocupados sin su escolaridad completa alcanzaba un 40,4%. No obstante, la encargada ministerial del Trabajo en el Biobío advirtió que el 35% continúa siendo una cifra preocupante. “No es menor la cifra y lo que estamos haciendo nosotros para regularizar esto es hacer el nexo con el Ministerio de Educación y apoyamos en que terminen su modalidad de educación”, sostuvo Quintana.
El reporte del observatorio muestra una relación entre la tasa de ocupación y el nivel educativo. Así, de acuerdo con el trimestre de abril-junio 2023, los profesionales presentan una tasa de ocupación del 76,7%; los técnicos de nivel superior del 73,3%; y las personas con educación media completa de 57,0%.
Con relación al año 2022, las personas con educación profesional completa y aquellos con educación superior incompleta registraron una disminución en la tasa de ocupación de 1,2 y 3,7% respectivamente. En cuanto al año 2019, se registró que las personas con menor nivel educativo aún no logran recuperar los niveles de ocupación previos a la crisis sanitaria por Covid-19.
Otro de los puntos que trató la seremi del Trabajo es que la escolaridad incompleta dificulta el acceso de las personas a capacitaciones para acceder a nuevas fuentes de trabajo.
“Es un obstáculo no menor. Tenemos el caso de la licencia A2. A3 y A5 que tienen como requisito tener el cuarto medio finalizado. En esos casos tenemos que apoyar en el término de la escolaridad, porque no sería correcto que nosotros le cerremos la oportunidad (…) hay que empujar el apoyo y tratar de mantener la motivación para que terminen su educación básica o media”, aseveró la seremi.
De la misma forma, Quintana agregó que “por ejemplo, la licencia clase B necesita octavo básico. Por lo tanto, lo que hemos hecho es ponerlos en contacto con la Provincial de Educación de Arauco y les enviamos el listado para comunicarnos con la sección de educación de adultos”.
En general, la tasa de ocupación en el Biobío para el mismo trimestre de 50,3%, equivalente a 690 mil 745 personas, con un aumento en 12 meses de 0,1%, lo que representa a 6 mil 558 personas más. A nivel país esta tasa fue mayor, situándose en un 55,7%, equivalente a 9.035.114 ocupados.
Respecto al trimestre anterior (febrero – abril 2023), se observa un aumento de 1.597 personas, detectándose una pequeña recuperación en relación con la tendencia mostrada desde principios de 2023.
Según el Ministerio de Educación (Mineduc), en Chile alrededor de 5 millones de personas mayores de 15 años no tienen escolaridad completa y cerca de 500 mil no saben leer y escribir o tienen muy baja escolaridad. Las personas jóvenes y adultas que no han iniciado o terminado sus estudios de educación básica y media tienen la oportunidad de hacerlo en distintos centros educativos regulados por el propio ministerio.
La finalidad de esta modalidad denominada Educación de Personas Jóvenes y Adultas (Epja) es que todas las personas ejerzan el derecho a recibir una educación de calidad, según sus características, intereses y necesidades.
En el Biobío, durante este 2023, 20 mil 671 personas son parte de la modalidad Epja. En detalle, 5 mil 760 personas están en la modalidad regular; 7 mil 420 en la modalidad flexible; 7 mil 281 en validación a través de exámenes libres; y 210 personas están en alfabetización a través del programa Contigo Aprendo.
Desde la Seremi de Educación en la Región explicaron que la Modalidad Regular de Educación para personas jóvenes y adultas está dirigida a quienes deseen iniciar o completar estudios básicos o medios; sus propósitos son garantizar el cumplimiento de la obligatoriedad escolar prevista por la Constitución Política de la República de Chile, brindar posibilidades de educación a lo largo de toda la vida, y procurar respuestas a requerimientos específicos de aprendizaje, personales o contextuales. Aquello con el propósito de garantizar la igualdad en el derecho a la educación a quienes, por diversas circunstancias, no pudieron iniciar o completar sus estudios oportunamente.
Desde el Mineduc aseguran que la deserción escolar se explica por graves hechos de inasistencia. En base a esto, en la seremi educacional del Biobío señalaron que existe una mejoría en los niveles de asistencia a clases y de matrículas de estudiantes, y una baja en el ausentismo docente en el país y en la Región.
De acuerdo con los datos entregados por el Centro de Estudios del Mineduc, a nivel nacional, la asistencia promedio de este año a las escuelas y liceos que reciben recursos públicos fue de un 89%, cuatro puntos porcentuales más que en marzo de 2022 (85%).
Según cifras entregadas por el sistema, si bien marzo del año pasado había 117 mil estudiantes con inasistencia grave (39% de la matrícula), ahora son 60 mil estudiantes los que tienen este problema (20% de la matrícula). Esto quiere decir que hay 57 mil estudiantes que dejaron de estar en la “zona roja”.
De acuerdo a este informe, el Biobío es la segunda región, después de Ñuble, con mejores resultados en esta materia, ambas zonas afectadas por los incendios forestales del verano destacan por ser las que más lograron reducir la inasistencia grave. De este modo se registra una baja del 19%, comparando marzo 2022 y marzo 2023.
Bajo ese contexto, la seremi de la cartera educativa en Biobío, Elizabeth Chávez, aseguró que “esto habla de un trabajo sistemático que hemos venido haciendo como Ministerio de Educación, de prevenir el ausentismo escolar y docente. Ha sido sumamente importante tener un programa de trabajo en esto, también quiero agradecer a los profesores, profesoras y asistentes de la Educación por el trabajo que han venido realizando, porque sin ellos esto tampoco se podría lograr”.