Así lo menciona el reciente Informe Económico Regional (IER) elaborado por la Facea de la Universidad de Concepción.
Como una economía en estado de “Ajuste” calificó el reciente Informe Económico Regional (IER) de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas (Facea) de la Universidad de Concepción (UdeC) la situación local, tomando en cuenta también el panorama nacional.
De acuerdo al estudio, esto se basa en el análisis de las políticas antiinflacionarias del Banco Central (BC) que mantiene en un 11,25% la Tasa de Política Monetaria (TPM).
“La economía de la Región del Biobío al igual que la economía nacional han continuado mostrando que se encuentran en una fase de ciclo marcada por una evidente desaceleración de la actividad económica, pero a través de una senda distinta.Esta dinámica podría significar un año 2023 con crecimiento cercano al exhibido en el año 2022”, explica el IER.
Tal como se indicó en el IER del mes diciembre 2022, este ajuste esperado ha sido producto de las políticas antiinflacionarias implementadas por el Banco Central de Chile llevando la tasa de política monetaria (TPM) desde 4.21% en enero del 2022 a 11.25% en la actualidad y que se ha mantenido inalterada desde el mes de octubre de 2022. Esto ha significado una desaceleración y posterior contracción del gasto privado (demanda) desde la segunda mitad del año 2022, especialmente el consumo y con ello afectando fuertemente al comercio”, agrega el documento.
Son varios los aspectos analizados en el IER, con información del BC y del INE. En materia de demanda, explica la indagatoria, la exportación sigue siendo relevante en el Biobío. El sector forestal es el más determinante con especial vínculo con Estados Unidos y China.
En términos de producción, de acuerdo al sondeo, se observa un cambio en el PIB regional entre 2013 y 2022, donde el área de servicios pasó de un 50% a un 54%; el comercio de 6% a 8%; y la producción de bienes de 44% a 38%.
El Dr. Claudio Parés, subdirector del IER agregó que en cuanto al mercado laboral el Biobío pasa por un escenario de harto desempleo. “Estamos mejor que el resto del país pero al desmenuzar esto vemos que la cantidad de empleo generado desde 2019 todavía no se equipara a ese año. Todavía queda espacio para recuperar gente que está saliendo de la fuerza de trabajo (…) estamos desperdiciando capacidad productiva que teníamos en 2019”.
Para el Dr. Iván Araya, director del IER, es importante considerar fenómenos coyunturales como el debate de la Reforma Tributaria y el nuevo proceso Constitucional.
“Al analizar la evolución de la economía nacional y local hay que considerar cuál es la incidencia que tiene la incertidumbre. Esta detiene la inversión, vale decir la actividad y generación de empleo. Así lo proyectos no se hacen o se postergan”.
“Por otro lado está la regulación para tener nuevos negocios. La inversión requiere reglas claras y estabilidad política (…) Regulación con respecto a impactos ambientales, al uso de ciertos suelos, etc”, sumó Araya.