Esto en comparación a la temporada anterior, de acuerdo al Gobierno. En tanto la leña certificada registra precios de hasta más de $200 por astilla.
En más de un 50% creció la oferta del pellet, en el Biobío, en comparación a la misma temporada del año anterior.
Así lo confirmó la seremi de Energía, Daniela Espinoza, quien detalló que hay un constante monitoreo en la industria de los elementos de calefacción, donde por una parte la leña certificada ha presentado alzas en sus precios debido al incremento en los costos de producción. En el caso del pellet, recordó, existe una estrategia por parte de las empresas, de subir la producción para evitar la crisis de 2022.
“(El Ministerio) está enfocado en asegurar la oferta de biocombustibles sólidos para abastecer al mercado nacional, que ha sido el principal problema del año anterior porque no había pellet, existía un problema de materia prima. Lo que nos hemos dado cuenta es que ha habido un cambio en precios por los costos de producción, según lo que nos ha dicho el mismo gremio. (La oferta) se ha visto aumentado en más de un 50% respecto a la temporada anterior”.
La producción, hasta el minuto, es de más de 20 mil toneladas. En cuanto a precios, un saco de 18 kilos puede llegar a valer $7.900 por estos días.
Junto al pellet y la leña, el gas y la parafina siguen estando dentro de los productos de mayor demanda para el uso dentro del hogar, en los meses de otoño-invierno.
Ante la variación de precios que han experimentado cada uno de ellos, es que la seremi explicó que “no tenemos competencias para realizar una fijación de precios de biocombustibles, en este caso de pellet o leña, eso hay que tenerlo a la vista. No tenemos ningún instrumento de subsidio a combustibles, lo que sí tenemos es instrumentos para productores en el caso de la leña, principalmente, para mejorar la oferta de leña de calidad en la región. Ahí hay programas como Leña más seca y recientemente lanzamos los Centros Integrales de Biomasa que están enfocados a leña y pellet porque también en cierta época del año no hay leña seca por falta de infraestructura para procesamiento o guardado”.
Hasta más de $200 puede costar, actualmente, una astilla en el mercado del Gran Concepción.
Juan Chávez, responsable de uno de los cuatro puntos de venta locales certificados por la autoridad, cuenta que vende la astilla en la zona a $140 o $150, porque las personas no están dispuestas a pagar más allá de eso.
En la misma línea, Alfonso Roa, otro de los productores aprobados con el sello de garantía de calidad, comenta que sus valores son “$150 la astilla de pino y eucalipto, y la de aromo cuesta $200 pesos hacia arriba, dependiendo del tamaño”.
Roa añade que, al parecer, los consumidores han optado por esperar leña de calidad y comprar más tarde. “En mi caso todavía no vendo casi nada, en el verano no se vendió nada, pero las ventas subirán desde junio en adelante porque vendo leña seca, no verde ni húmeda”.
En tanto, la parafina todavía se mantiene bajo la barrera de los $1.000 por litro.
Entre los 23 servicentros disponibles en Concepción para comprar este hidrocarburo, el monto por litro varía entre los $935 y $950, promediando los $940 pesos en la capital penquista.
En el caso del gas el balón de 5 kilos bordea los $12.000, mientras que el de 11 supera los $21 mil. El de 15 kilos, a su vez, es posible encontrarlo a $22 mil en cadenas de Concepción.