Carne en Semana Santa: comercio apuesta por reducir oferta pero sin variar precios

Carnicerías y restaurantes indican que la compra por unidad o platos disminuye por estos días. Sin embargo, los horarios de atención no tendrán mayores alteraciones a excepción del viernes.

Tanto vendedores de carne como dueños de locales de comida no se alarman por posible baja en sus ventas, en vista de Semana Santa. Asimismo, aseguran que no existirán bajas ni alzas para el producto durante este próximo fin de semana largo.

Eso sí, en el marco de la festividad religiosa, desde la industria cárnica se preparan con menor disponibilidad del producto para evitar pérdidas.

Así lo indica Alejandro Muñoz, responsable de Carnicería Denavi Sur de Talcahuano, quien manifiesta que “las ventas son bajas en cuanto a carne para estas fechas, todos los años es así”.

Por lo mismo, en vez de realizar ofertas para atraer más público, decidió traer menos cantidad de carne en relación a cualquier otro momento del año.

En la misma línea, Marcos Burgos, administrador de Distribuidora Las Lomas del centro penquista, dice que “vamos a estar muy bajos en comparación con el año pasado”.

El vendedor cuenta que en 2022 las recaudaciones estuvieron “muy buenas. Se nota al tiro porque trajimos más mercadería y también vendimos más, aunque tampoco trabajamos los feriados. Tenemos esos inventarios y analizamos las ventas, y fue una semana santa muy positiva para el local”.

Pero para la presente celebración religiosa, visualiza un panorama distinto. “Va a ser normal para nosotros, no hay preparación especial para Semana Santa. Eso sí, traemos menos carne porque hay dos días en que la venta está parada”, asegura.

Por el contrario, existen en el rubro quienes tienen una mirada más positiva sobre el consumo de este alimento.

Ese es el caso de Bernardo Jara, dueño de Carnes Don Bernardo de Concepción. “Antiguamente para mí era Semana Santa, ahora ya no lo es, la gente come carne igual. Ha mejorado bastante la venta porque antes no se vendía nada”, analiza.

Jara se atreve a sentenciar que “en cuanto a una semana normal, se vende un poquito más. Antes trabajaba en JD y los viernes de Semana Santa eran muy buenos. Seguramente la gente vendrá el sábado a comprar con normalidad y el domingo también quizás nos vaya bien”.

Restaurantes especializados

Antonia Navarrete, dueña de locales La Parrilla de Don Talo, tiene como platos fuertes los que incluyen carnes rojas o blancas, e indica que esperan con ansias el “domingo de resurrección”.

“El día más fuerte que tenemos en estas épocas es el domingo, donde la gente parece que extraña la carne y vuelve con todo a pedirla”, destaca.

En detalle, Navarrete sostiene que “trabajamos con menos carne a disposición, pero sí tenemos la carta completa y a precio normal. Nuestro público es tan variado que el nivel de consumo puede que baje, pero no más allá de un 10%. El año pasado tuvimos lista de espera, y eso que estábamos saliendo de la pandemia. Por eso esta vez estamos súper preparados”.

Valores

Precisamente en ese aspecto es que los diversos actores hacen hincapié importante, ya que no planifican modificar valores para incentivar la compra.

“No se ha subido ni bajado, se mantienen los precios, tal cual lo hacemos para fiestas de fin de año”, afirma Marcos Burgos, misma línea que siguen sus pares.

En su negocio, el tapapecho cuesta $7 mil 980, mientras que el choclillo bordea los $10 mil. Mientras tanto, en el de Bernardo Jara los lomos alcanzan los $15 mil, el filete $17 mil y la posta $9 mil.

Todos estos cortes, indican, son típicos de la fecha, ya que los clientes que comen carne suelen prepararla a la olla o en asados.

Horarios

Ninguno de los mencionados planea trabajar el viernes, pero sí sábado y domingo con normalidad hasta mediodía, a excepción de Las Lomas, que no abre feriados. La Parrilla de Don Talo sábado y domingo hasta las 18:00 horas.