Altos costos de inversión es una de las principales causas que explican la petición, según los dirigentes. Desde el Gobierno esperan que al 2035 solo se vendan vehículos livianos de cero emisión.
Falta de incentivos estatales e infraestructura adecuada en las rutas son los principales puntos que acusan los gremios transportistas del Biobío, en vista de una migración hacia la electromovilidad.
“No hay condiciones para pasar desde el petróleo a la electromovilidad. Hay ganas de hacer las cosas por parte de la autoridad pero falta mucho. Recordemos que hace un tiempo los primeros vehículos que llegaron con energía eléctrica fueron pocos y era muy difícil instalar enchufes para este tipo de autos en los servicentros”, manifestó Daniel Meza, presidente de la Asociación de Gremios del Transporte Industrial de Chile.
Según el dirigente, además, no existe infraestructura suficiente en las rutas del país, e incluso en centros urbanos, que garanticen una movilidad exenta de problemas técnicos y una capacidad de energía suficiente para cubrir tramos largos.
De acuerdo al listado oficial disponible en la página de la Plataforma de Electromovilidad del Ministerio de Energía, en el Biobío hay 29 conectores en base a 11 estaciones de carga, donde la mayoría está en el Centro de Concepción y alrededores. Hay que considerar también que en el caso de la Ruta 5 Sur, solo hay presencia de electrolineras en Los Álamos y Los Ángeles.
“Hoy cambiarse a la electromovilidad en el transporte de carga significa encarecer el costo del activo fijo en más de un 80%. No existe la empresa en Chile que pague tarifas acordes a la no contaminación”, dijo Daniel Meza, agregando que el hecho de que existan solo dos puntos de carga en la Ruta 5, a nivel regional, va en contra de la autonomía promedio de las máquinas de energía limpia.
El transporte urbano ve un contexto parecido. Desde el Sindicato de Taxis de Concepción aseguran que están a espera de alcanzar beneficios estatales para la adquisición de vehículos eléctricos, apelando al alto valor de los mismos.
“Sabemos que tenemos que apuntar hacia allá por un tema de eficiencia y contaminación. No obstante, los vehículos eléctricos son muy costosos y todavía no se concreta algún tipo de aporte estatal para avanzar hacia la electromovilidad, a pesar de haber alcanzado acuerdos con el Ministerio de Transporte del Gobierno anterior”, comentó Héctor Pino, presidente de este sindicato penquista.
Cabe destacar que desde el 2010 en adelante, el uso de vehículos eléctricos se ha extendido como respuesta al fenómeno del cambio climático e impulsado por los avances en las tecnologías de baterías de iones de litios. Según datos del Ministerio de Energía, hay 3.704 vehículos eléctricos registrados a nivel nacional. En la Región del Biobío el número de estos autos es de 151, entre híbridos y de electromovilidad completa.
“Actualmente Chile tiene como hoja de ruta la Estrategia Nacional de Movilidad, la cual fue publicada en el Diario Oficial en febrero de este año. En el documento se establece como una de nuestras metas principales, que al 2035 el 100% de las ventas de vehículos livianos y medianos serán cero emisiones; el 100% de las ventas de transporte público (buses, taxis y colectivos) serán cero emisiones. Todo ello, irá en directo beneficio de la calidad de vida de las personas”, sostuvo Daniela Espinoza, seremi de Energía del Biobío.