De acuerdo con el último informe de la Asociación Nacional Automotriz A.G. (Anac), Biobío es segunda en crecimiento de ventas de vehículos.

El documento establece que al analizar el desempeño por regiones, se desprende que Ñuble (69,6%), Bío Bío (60,4%) y la Araucanía (57,8%) son las con mayor crecimiento durante marzo con respecto al mismo período del año anterior, explicado por la continua reanudación de faenas productivas, la progresiva apertura y recuperación del comercio y la mayor movilidad.

Además, la publicación indica que al revisar las ventas por segmento durante marzo, las camionetas pick-up y los SUV han demostrado una recuperación de 49,1% y 36,6% respectivamente a nivel nacional, mientras que los vehículos comerciales registraron un incremento de 13,2% y los de pasajeros aumentaron 9,6% al compararse con el mismo mes del año pasado, en línea con las preferencias de los consumidores para optar por las carrocerías de vehículos que más versatilidad y practicidad les entreguen.

Arnold Jiménez Inzunza, ingeniero Civil Industrial y académico del Área de Administración de Inacap Sede Concepción-Talcahuano, sostiene respecto de las cifras del informe de Anac que el incremento del desempleo, a raíz de la pandemia y de la desaceleración de la economía, ha provocado que el emprendimiento tome fuerza como una forma de reinvención laboral. Este fenómeno se ha visto acrecentado aún más debido a que las actividades de última milla han pasado a conformar un valor agregado para el mercado.

Jiménez, añade que es por esta razón que cobra gran fuerza la adquisición de vehículos grandes de uso práctico como las camionetas pick up. “Por otra parte, la ayuda estatal y de los retiros de los fondos de pensiones han provocado que exista mayor liquidez en el mercado, incrementándose así las posibilidades de adquirir un vehículo”, afirma.

Entre las preferencias, el académico del Área de Administración de Inacap destaca las marcas Chevrolet y Cherry, siendo los modelos Sail y Tiggo 2, respectivamente, los más demandados, por entregar la mayor cantidad de prestaciones a un precio asequible. “Es posible que esto se mantenga en 2022 ya que nos encontramos ante un escenario económico adverso que impulsa la búsqueda de alternativas de ingresos independientes”, concluye.