Alertan que Lota y Talcahuano tienen los mayores porcentajes de morosos

Desempleo más alto, menores ingresos y confinamientos explicarían los guarismos. Informe deja fuera la morosidad educativa, por lo que cifras podrían elevarse aún más. Crear ramo de Educación Financiera en colegios sería clave en la implementación de soluciones de mediano y largo plazo.

De acuerdo con el XXXIII Informe de Deuda Morosa, elaborado por la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián con información entregada por Equifax, Lota y Talcahuano presentan los mayores porcentajes de morosos respecto de la población mayor de 18 años.

Le siguen las comunas de Los Ángeles, Penco y San Rosendo en la misma medición.

Luis Felipe Slier, director de Ingeniería Comercial y los programas Advance de la Facultad de Economía y Negocios de la USS, sostiene que esta situación se podría explicar “por la mantención de las cifras de desempleo, pues en el caso de las comunas de Lota y Talcahuano, existiría una correlación positiva entre la mayor cantidad de morosos y la tasa de desempleo que exhiben dichas comunas”.

Caída en cifras regionales

De acuerdo con el estudio, un 29,5% de la población mayor de 18 años de la Región del Biobío tiene una o más deudas impagas lo que corresponde a 370.076 personas, ocupando el cuarto lugar a nivel nacional en porcentaje de morosos. La cifra bajó en todos los segmentos etarios a excepción del grupo de 70 años y más, donde se evidenció un incremento del 3,3% entre junio de 2020 e igual mes de 2021.

Para Slier el aumento se explica por tratarse de un segmento que no se vio beneficiado con los retiros del 10% de las AFP. “Además, antes de la pandemia, ya poseía un nivel de pensiones en promedio bajas y es posible que muchas personas recibieran apoyo de familiares, quienes, producto de situaciones variadas como la pérdida de empleo, habrían dejado de apoyarlos por lo que se pudieron haber visto en la necesidad de aumentar su deuda y finalmente, dada su limitada capacidad de pago, aumentaron su nivel de morosidad”.

Morosidad educativa

Andrés Ulloa, académico de la Ucsc, tras ser consultado por este medio, apunta al efecto del cambio en la ley que también fue mencionado por el director de Ingeniería Comercial de la USS, en cuanto a que ya no se publica la morosidad “educativa”, lo que tendría un peso relativo a la hora de las mediciones nacionales, regionales y comunales.

Ulloa alude además a que muchos habrían usado el dinero de los retiros para bajar sus deudas y las morosidades vinculadas como se han indicado en informes del Banco Central.

“Desde el punto de vista de la economía regional, creo que son buenos datos porque la liquidez ha permitido que muchas personas pudieran cumplir con sus compromisos lo que les deja espacio para adquirir mayor capacidad de deuda a futuro y eso es una ventana que todos debemos dejar abierta porque no sabemos qué ocurrirá más adelante dado que la situación aún está muy inestable”, advierte el académico.

Visión del Gobierno

Mauricio Gutiérrez, seremi de Economía, resalta que gran parte de los indicadores de endeudamiento han bajado. “El endeudamiento en sí no es malo y el sobre endeudamiento que conlleva una morosidad, nunca es bueno”, señala la autoridad.
Además, confirma que en los casos de Lota y Talcahuano, sus resultados tengan más que ver con situaciones de desempleo, menos ingresos formales, menor capacidad de pago y los confinamientos.

Educación financiera

Otro de los puntos relevantes en la discusión sobre la morosidad tanto regional y comunal, es la urgente necesidad de contar en los colegios con un ramo o asignatura de Educación Financiera.

“Se da acceso a crédito y cuentas corrientes a jóvenes de primer año de universidades o secundarios, quienes no están capacitados para administrar responsablemente estos recursos” enfatiza el director de los programas Advance de la Facultad de Economía y Negocios de la USS. También, resalta las acciones desarrolladas por la universidad y la RedCol de colegios para llevar Educación Financiera a estudiantes, padres, apoderados y trabajadores de los establecimientos.