El presidente del gremio, Antonio Errázuriz, también agregó que las malas planificaciones estratégicas locales están jugando en contra del desarrollo.
Las dificultades para acceder a una vivienda, el encarecimiento y el déficit de estas para las familias esforzadas, han provocado una crisis social indiscutible en medio de una crisis sanitaria y económica.
Se trata de un problema que necesita de una mirada sistémica. Como ya se ha informado, los campamentos y tomas han quedado en evidencia.
El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción a nivel nacional, Antonio Errázuriz, estuvo de visita en el Gran Concepción y realizó un extenso análisis de esta lamentable realidad.
Un primer dato revelador. “Hicimos un estudio tiempo atrás, en que demostraba que una familia de clase media necesitaba siete años destinando el 100% de sus sueldos a una casa. Eso es imposible”, lamentó a Diario Concepción el representante gremial.
Y añadió: “Eso comparado con otros países avanzados, en que son tres a dos coma cinco años. Tenemos una gran brecha ahí”.
“La razón del alza de la vivienda no está por la rentabilidad del negocio, sino que por la escasez de suelo. Eso ha sido determinante en el alza del precio de la vivienda”, aseguró Antonio Errázuriz.
Lo que es peor, durante el 2020 y 2021 se ha experimentado un encarecimiento de los materiales de la construcción. Lo que motivó incluso el anuncio de la Fiscalía Nacional Económica del desarrollo de una investigación.
A eso se debe sumar la baja de mano de obra en medio de la pandemia y la poca sintonía entre las comunidades, municipios, gobierno y empresas constructoras, en lo que dice relación con los planos reguladores (por ejemplo, la limitación de las alturas y el que ahora se discute: el Plan Regulador Metropolitano).
Para entender la profundidad del problema, este viernes los dirigentes de campamentos y tomas de terreno de Talcahuano, Lota, Curanilahue, Los Álamos y Lebu, entre otras comunas, sostuvieron una reunión con el Gobernador Regional del Biobío, Rodrigo Díaz, para precisamente hacer ver las dificultades que tienen para tener una solución desde el Ministerio de Vivienda, que genera proyectos que después son levantados por privados mediante subsidios.
También estuvieron presentes el diputado (PS) Manuel Monsalve, la alcaldesa de Curanilahue, Alejandra Burgos, y Marcela Elguín, en representación de la diputada Joana Pérez (DC), quienes advirtieron que los campamentos han aumentado en un 60% debido a la crisis económica producto de la actual pandemia.
En ese contexto, la representantes de comités de vivienda de la Provincia de Arauco, Lilian Nahuelpán, detalló bien lo que ocurre al Gobernador Díaz.
“Hace años que estamos trabajando, golpeando puertas y en reuniones con Forestal Arauco, porque lamentablemente ellos son los dueños de los terrenos. Esto se ha ido agravando, con gente que se sumó a los campamentos y a las tomas, por no tener el derecho a postular a una vivienda, ya sea, porque no hay terrenos, y si los hay, los precios son muy elevados. Por eso, con el retiro del 10% o recursos del IFE, muchas familias han podido ir levantando sus casas”, reveló la dirigenta.
De ahí que las interrogantes que el máximo representante de la Cámara Chilena de la Construcción, Antonio Errázuriz, planteó a este medio tras su recorrido cobran relevancia: “¿dónde podemos construir?, ¿cómo coordinamos con el Estado?, ¿cómo este pone a disposición, por ejemplo, la gran cantidad de terrenos fiscales en el país?”.
Y acotó: “No sé la cifra en este momento, pero debiéramos poder utilizarlos los terrenos, construir ahí y evitar estar como los buscadores de tesoros (…) Esa es la importancia de poder formar estas mesas de trabajo con los municipios”.
Entre tanto, el gobernador Díaz adelantó a las comunidades que “para colaborar el Gobierno Regional puede hacerlo con la entrega de recursos, bajo la Ley de Presupuestos, por un monto de alrededor de $2.400 millones para la compra de terrenos en la Provincia de Arauco, ya que así define y acota dicha glosa”.
El diputado Manuel Monsalve advirtió que la crisis de la vivienda es profunda. “La región tiene una gravísima crisis en material habitacional. Hay más de 100 campamentos y más de 90 tomas de terreno, donde hemos recogido un relato donde hay niños que no tienen acceso a agua potable, condiciones sanitarias, abrigo ni conectividad que le permita el acceso a la educación”.
El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción subrayó que “hoy día van a ser importante las gobernaciones con los planes de desarrollo urbano, para que las ciudades que nos permitan densificar equilibradamente , sin desmerecer la calidad de vida de sus habitantes y que se permita construir a valores que sean accesibles en general a una familia y no se vean reflejado los impactos en los precios. Entonces pero para eso tenemos que buscar y buscar la opciones”.
El recién asumido gobernador Rodrigo Díaz parece tenerlo claro: “Tomaremos contacto con los encargados de la política habitacional de Chile y en la Subsecretaría de Desarrollo Regional, con el objetivo de tener una estrategia propia, no una estandarizada a nivel nacional”.