Fenómeno se explica por la serie de bonos, retiros previsionales y accesos a nuevas líneas de financiamiento, pero analistas advierten que se volverán a cifras prepandemia cuando cesen estos apoyos.
Tendencia positivamente a la baja es la que se desprende del último informe de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento (Superir), en cuanto al número de personas y empresas que se han visto obligadas a declararse en quiebra en Biobío:un 40% menos de personas y un 12% menos de empresas que han tenido que liquidar sus bienes entre enero y mayo en relación a igual periodo de 2020. (Ver gráficos).
A.Oreña
Para algunos analistas, estos números se explican en parte por la serie de ayudas económicas que se han desplegado en favor de personas y pymes, incluyendo ahí los retiros previsionales. También, se una señal de reactivación económica que si bien aun está muy ligada a la evolución de la pandemia, en términos generales es un mejor año que en 2020, favoreciendo entonces estas positivas cifras por la alta tasa comparativa.
Dentro del desglose, destaca la baja de un 89% de reorganizaciones solicitadas por personas, el ta citado -40% de procesos de liquidación de deuda de la persona deudora.
“Debido a la mayor liquidez de personas y pymes por los bonos y ayudas y también acceso a nuevas líneas de financiamiento como los Fogape Reactiva y Línea Covid, más los retiros de 10% se han suspendido los estados de insolvencia, pero no lo ha solucionado en forma definitiva, por lo tanto, lo que nosotros vemos es que hacia el tercer trimestre la cantidad de quiebras de empresas volverían a asemejarse con las que teníamos pre pandemia”, estimó el director legal de Grupo Defensa, Mario Espinosa.
Por su parte, el abogado y académico, Diego Messen, dijo que es efectivo que la tendencia de las liquidaciones viene en baja, ya que muchas de las empresas que no pudieron enfrentar la pandemia, ya se sometieron a un proceso concursal, por lo que los más probables que este tipo de procedimientos vayan en retirada, dijo. “Lo anterior, sumado a que algunas empresas que estaban con una situación económica débil, pudieron sobrellevar la crisis con una nueva inyección de beneficios estatales. Habrá que estar atento al escenario que dejará la Fase 1, en especial en la región Metropolitana, ya que podría afectar a las economías que han sido más golpeadas, como la industria de entretención y esparcimiento, que necesariamente han debido suspender sus actividades en esta Fase. Todo dependerá de la extensión y duración que tenga cada restricción y cómo seguirá evolucionando el pase de movilidad”.