De acuerdo al análisis de Chile Deudas si bien hoy los retiros y beneficios del gobierno muestran cifras alentadoras, en el largo plazo los indicadores podrían mostrar lo contrario.
De acuerdo al XXXII Informe desarrollado por la Universidad San Sebastián y Equifax, los deudores morosos cayeron un 11,8% entre marzo de 2020 y marzo de 2021.
Es decir, 565 mil personas salieron del registro en los últimos doce meses, bajando a 4,2 millones de habitantes.
Con respecto a los trimestres anteriores, se trata del tercer período consecutivo a la baja, con una caída de 2,4% en tres meses.
En lo que se refiere a la Región del Biobío, el XXXII Informe reveló este martes que entre marzo de 2020 e igual mes de 2021, la cantidad de deudores morosos en la región disminuyó en un 14,2%.
Sin embargo, el director de Chiledeudas.cl, Guillermo Figueroa llama a la cautela. “Proyectamos que durante el próximo año la cantidad de morosos en la Región del Biobío podría incluso superar los 450.000 habitantes, lo que sólo podría atenuarse con una mejora en ingresos de los hogares que hoy están afectados por el mercado laboral deprimido a nivel nacional”.
Figueroa sostuvo que los buenos indicadores obedecen más a la coyuntura de ayuda estatal. “Los niveles de morosidad en los hogares están en niveles históricamente bajos, gracias a los retiros de dineros de fondos de pensiones y los bonos del Gobierno, además de la postergación de pagos de créditos en la banca”.
Y , por otro lado, a que sería sólamente “un efecto temporal” y que la recuperación económica podría tardar entre este y el próximo año.
“Es probable que sin estos dineros de fondos de pensiones ni ayudas de Gobierno y debiendo enfrentar nuevamente los pagos de créditos, la morosidad vuelva a subir”, alertó Figueroa.
Cabe recordar que el XXXII Informe de Deuda Morosa de la Región del Biobío arrojó una disminución promedio de $1.645.867 a $1.524.368. Es decir, menos 7,4%.
Se trata, porcentualmente, de la mayor baja a nivel nacional. En el país, la mora promedio aumentó en un 3,3%.
“En los últimos doce meses, se han entremezclado varios factores como el llamado a no endeudarse, las cuarentenas que han limitado las oportunidades de endeudamiento, la reprogramación de las deudas por parte de las entidades financieras y las mayores barreras para acceder a nuevas deudas, entre otros”, confirmó el director de Ingeniería Comercial y programas Advance de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián, Luis Felipe Slier Muñoz.
Y subrayó que “a lo anterior se suma la mayor liquidez a raíz de los retiros del 10% de los fondos de las AFP y de las ayudas entregadas por el Estado. Todo esto ha permitido que una parte de la población pague sus deudas”.
De ahí que el próximo año el panorama pueda cambiar.