Mujeres y menores de 29 años aún no se recuperan a un año del inicio de la pandemia
12 de Mayo 2021 | Publicado por: Javier Ochoa - Comunicado de Prensa
Los resultados del último Boletín Laboral CEPR Bío-Bío muestran que, a un año de la llegada del COVID-19 al país, aún hay grupos que no recuperan sus niveles de empleo, generando dificultades para la recuperación de la ocupación regional.
En su más reciente edición, el Boletín Laboral CEPR -elaborado por la Escuela de Negocios UAI a través de su Centro de Economía y Política Regional (CEPR), en alianza con el Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES)-, realizó un análisis de la situación ocupacional de la Región de Bío-Bío a un año del inicio de la pandemia.
En él, se puedo apreciar que aún queda mucho por hacer para recuperar las cifras de empleo exhibidas hace un año atrás, en especial en los grupos que no se han podido recuperar, como las mujeres, los menores de 29 años, las personas con bajos niveles de escolaridad y quienes tienen más de 45 años y se desempeñaban en el sector “Comercio” antes de la crisis.
Recuperación de la ocupación en la Región de Bío-Bío
Al observar en detalle los datos de la Encuesta Nacional de Empleo (ENE), es posible apreciar algunos de los grupos más afectados por la crisis.
En el caso del empleo masculino, este ha tenido una recuperación que incluso mejora las cifras exhibidas hace doce meses atrás en los sectores de “Actividades profesionales y administrativas”, “Educación”, “Industrias Manufactureras” y “Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca”. Por otra parte, uno de los sectores en los que el empleo masculino ha sido severamente afectado es “Actividades financieras, seguros e inmobiliarias”, por lo que se debe tener especial atención para determinar si este sector mejorará sus cifras a futuro o si necesita planes de apoyo para sus trabajadores.
En el caso del empleo femenino, se aprecian niveles menores de recuperación que los hombres, especialmente en los sectores de “Explotación de minas y canteras” y “Actividades de los hogares”, este último de especial cuidado, dado que son ellas las que más se emplean en esta área.
En lo relativo al número de ocupados por sector económico y rango etario, podemos ver que uno de los casos que más llama la atención es el del sector “Comercio”. Aquí, el tramo entre 30 y 44 años ha aumentado su nivel de ocupación levemente, mientras que el resto de los grupos ha disminuido, en especial en las personas de 45 o más años, que tienen cerca de 17 mil menos empleos en esta área.
Por otra parte, el grupo entre 15 y 29 años ha sido el que menor recuperación ha logrado, encontrándose en casi todos los sectores por debajo de las cifras de ocupación de EFM-2020.
En lo relativo a la recuperación del empleo por categoría de ocupaciones y nivel educacional, se aprecia que quienes han logrado mejorar e incluso superar los niveles de hace doce meses atrás son mayoritariamente quienes poseen educación técnica o universitaria, en desmedro de las personas con educación primaria o secundaria, quienes han logrado una recuperación aún muy lenta.
Es por estas razones que se hace necesario apoyar los grupos más afectados con planes y programas que les permitan recuperar sus niveles de trabajo prepandemia, haciéndose cargo de las desigualdades existentes en la recuperación del empleo en la región.