Frente al quiebre de stock que marcó 2020, la industria aseguró que este año hay una mayor producción. Hoy poseen un 40% más de volumen, aunque se advierte que puede no ser suficiente.
“En los últimos 10 años, el mercado del pellet en Chile creció un 900%”, informó el gerente de la Asociación Chilena de la Biomasa (Achbiom), Antonio Minte, en el marco del seminario “Pellets y combustión: Visión global y local hacia la eficiencia térmica y la descontaminación”, organizado por Biobío Pellet de la Ucsc, iniciativa financiada por el Gobierno Regional del Biobío a través del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC).
Y Minte dijo que la proyección es de un crecimiento exponencial, esperando en 2030 llegar a alcanzar una producción de cerca de 900 mil toneladas.
En cuanto al consumo, hoy lideran Los Lagos (30.608 toneladas), Araucanía (27.600 toneladas) y Biobío (24.505 toneladas).
“Los beneficios del uso de pellets para calefacción para el ambiente son relevantes, ya que se traducen en una reducción de CO2 de hasta un el 90% en comparación con los combustibles fósiles”.
Así lo afirmó el Dr. Mario Martin König, del Research Associate at DBFZ Deutsches Biomasseforschungszentrum gemeinnützige GmbH in Leipzig, .
En el encuentro, el Prorrector de la Ucsc, Andrés Varela, sostuvo que “la región del Biobío tiene una tradición histórica en la producción de elementos combustibles, que viene de la minería del carbón. Sin embargo, eso ha quedado en el pasado y hoy tenemos una oportunidad de una revancha en la generación de energía, siendo protagonistas en la producción de energía limpia, como la biomasa e hidrógeno verde”.
Cabe recordar que la estufa a pellets tiene una eficiencia superior al 90%, por otra parte, la combustión de leña húmeda es cercana a un 50%; además, la disminución del material particulado 2.5 es drástica al hacer recambio de leña a este sustituto, se estableció.
En este sentido, el seremi Energía del Biobío, Mauricio Henríquez, explicó que “en términos de mercado, el pellet ha venido creciendo alrededor de 25% en los últimos años. Sin embargo, en 2020, y relacionado con la pandemia que hizo que mucha más gente pasara tiempo en sus viviendas, se produjo un aumento de demanda, que la oferta no fue capaz de suministrar, sobre todo en el sur del país. Por eso la relevancia de este proyecto para encontrar y desarrollar nuevos modelos de negocios y mejor calidad de pellet, que se traduzca en mejor calefacción y menos gasto para las familias”.
La autoridad destacó que Biobío produce aproximadamente el 80% del pellet que se consume, y estimó que la demanda 2021 estará en unas 120 mil toneladas.
Una alta cantidad de biomasa residual en bosques y plantaciones, sumado a la necesidad de nuevos combustibles con bajas emisiones atmosféricas, hacen que la producción del pellet sea una alternativa que, entre otros beneficios, podría prevenir la propagación de incendios forestales. Así lo afirmó en su presentación la Dra. Laura Azócar, quien encabeza el proyecto FIC Biobío Pellet.
La iniciativa apunta a potenciar las mipymes productoras forestales y de leña nativa a través del desarrollo de innovación para producir pellet; potenciar el desarrollo e incremento de la competitividad de mipymes productoras de pellet; y capacitar y difundir a la comunidad las claves de la tecnología y los beneficios de la implementación y uso de pellet para calefacción.
El proyecto, que cuenta con una línea de manejo para la prevención de incendios y una línea de bionegocios, propone un sistema de secado geotérmico-fotovoltaico para la producción de pellet. En paralelo, se estudia el uso de aceites residuales de frituras como aditivo para el pellet que pudiera influir en el poder calorífico mediante una metodología de optimización que busca no afectar negativamente las propiedades mecánicas.