Las mujeres de la zona perdieron un 23,8% de ocupación en el peor momento de la crisis, y este indicador aún se encuentra en un 17,2% por debajo de los niveles de 2019.
En su más reciente edición, el Boletín Laboral CEPR realizó, con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, un análisis comparativo de la caída y recuperación de la ocupación por género. En la Región del Bío-Bío, ellas fueron más afectadas por la crisis derivada de la pandemia por COVID-19, especialmente en el caso de las trabajadoras informales.
Al observar en detalle los datos, es posible apreciar que la ocupación femenina bajó mucho más que la de los hombres en el peor momento de la crisis, perdiendo un 23,8% de ocupación durante el trimestre AMJ-2020 (abril-mayo-junio). En cambio, la disminución del empleo masculino en el mismo periodo solo llegó a ser un 15,3%.
Estos resultados muestran que las mujeres fueron más afectadas por la crisis en la región, no solo perdiendo más empleos, sino que además sin que aún puedan recuperar totalmente la ocupación que exhibían hace doce meses. De hecho, en el periodo en estudio, ellas muestran un 17,2% menos de ocupación en comparación con el trimestre NDE-2019 (noviembre-diciembre-enero).
En tanto, al observar la caída y recuperación de las trabajadoras de la región según formalidad e informalidad, podemos apreciar que las trabajadoras informales han sido mucho más afectadas por la crisis, llegando a perder cerca del 50% de su empleo en el trimestre AMJ-2020 (abril-mayo-junio).
En el trimestre en estudio (NDE-2020), además, se observa que la recuperación de las trabajadoras informales ronda el 78% de la ocupación que tenían en el mismo periodo de 2019, hecho que reitera la necesidad de generar planes que ayuden a las mujeres a volver al mercado laboral, especialmente en el caso de quienes se desempeñan en puestos de trabajo informales