Más de nueve meses sin trabajar y sin acceso a mayores beneficios por deudas acumuladas tienen muy complicado al sector. Cámara de comercio de Tomé pide flexibilidad y ampliar aforos de restoranes.
Una cruda realidad atraviesan pymes turísticas de la Región y sus proyecciones para el verano 2021 no se ven nada auspiciosas.
Así se desprende de los testimonios de dueños de pequeñas empresas del rubro quienes piden ayudas eficientes para su sector.
“Esta situación es muy compleja, porque a medida que no se ve una reapertura gradual, más empresas pequeñas irán muriendo en el camino”, afirma Andrés Harun Atik, dueño de Turismo Stella Maris de Talcahuano.
También apunta a que la ayuda económica desde el gobierno, “hasta ahora, ha sido muy escasa y no ha llegado a la gran masa de emprendedores y empresas turísticas de la zona por lo cual el futuro para este periodo estival se ve complejo sino se toman las medidas necesarias para apoyarnos”.
Harun comenta que ya suman 9 meses sin trabajar lo que para él y su sector es una situación insostenible y manifiesta su temor por posibles cierres masivos en la Región.
“Vemos con mucho pesar como han ido bajando cortinas muchos colegas dedicados al rubro, cuyo único sustento de su hogar era el turismo”, enfatiza.
Dianna Valderrama, representante legal de Prosub, una empresa principalmente dedicada a promover el buceo señala que les ha tocado especialmente fuerte vivir la pandemia debido a una fuerte inversión realizada en la construcción de un edificio.
En su caso, se trata de una estructura que alberga tres actividades como son capacitación marítima, turismo en el área de buceo y venta de productos relacionados con buceo en general.
Además, dice que arrastra deudas que se han acumulado y que le impedirían postular a fondos lo que se uniría al hecho de que al estar en Dicom no puede acceder a beneficios.
“Estamos con el agua hasta el cuello porque se acumulan las deudas y no hay ingresos suficientes para cumplir los compromisos por lo que podemos perder nuestro edificio y nuestra empresa que tiene más de 30 años de trabajo si la situación no mejora de aquí a marzo”, explica Valderrama.
Desde Tomé, José Mardones, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo detalla que las pymes de turismo están bastante complicadas, particularmente las ubicadas en el borde costero que son fundamentalmente pymes hoteleras, gastronómicas y de hospedaje de Dichato, Coliumo o Cocholgüe.
Para la represente legal de Prosub, las proyecciones para el verano 2021 tampoco son buenas debido a que sus ventas están ligadas a la apertura de caletas y accesos al mar que, hasta ahora, indica, se encontrarían cerradas en su ámbito de acción.
Mardones postula que es importante para mejorar las proyecciones poder permitir el trabajo de restoranes y ocupar el 25% del aforo de personas para ir ampliándolo progresivamente. Esto unido a poder avanzar al paso 3 o 4, pero es algo que se ve muy poco probable, afirma.
