Efectos positivos y negativos del segundo retiro de AFP
15 de Diciembre 2020 | Publicado por: Edgardo Mora

Si bien es una medida que puede traer cierta tranquilidad a las familias que han perdido su ingreso, los retiros tienen efectos negativos actuales y sobre todo futuros, pues la disminución del ahorro en las cuentas individuales presionará el gasto fiscal en pensiones.
Por Luis Felipe Slier Muñoz
Director Ingeniería Comercial y Programas
Advance FEN
USS
El año 2020 quedará marcado por efectos culturales, sociales, económicos, de salud y principalmente de incertidumbre provocados por la pandemia. Una incertidumbre que agobia a la población, sobre todo respecto a las condiciones de salud, a las expectativas laborales, a la educación y a las condiciones económicas en nuestro mercado.
En ese contexto, el retiro del segundo 10% de las AFP sin duda alguna traerá un respiro a muchas familias que han visto disminuidos sus ingresos y a otros que simplemente han perdido su fuente laboral. La medida les permitirá terminar este año 2020 de una forma más tranquila en el corto plazo, pues se sabe que, en el caso del primer retiro, los montos fueron destinados en parte a pago de deuda, en algunos casos con niveles de morosidad, y también a bienes de consumo de primera necesidad.
Sin embargo, también un porcentaje de las personas que pueden realizar estos retiros, destinarán los recursos a consumo de distintos bienes y servicios, que no corresponden a aquellos de primera necesidad. En ese contexto, lo que se prevé es una fuerte presión inflacionaria, dado que muchos productos de importación han dejado de importarse y varias empresas han manifestado ya quiebres de stock en productos, por ejemplo, en materiales de construcción ya que familias han destinado sus recursos a reparar sus hogares y mejorar su habitabilidad. Así, veremos en el mediano plazo un alza en la inflación, dado el efecto de consumo y mayor liquidez en el mercado, y con ello, por ejemplo, un aumento de la UF, que se refleja en los créditos.
Golpeado comercio
Otro aspecto positivo del retiro de los fondos previsionales, medida que genera un complejo panorama futuro, es el efecto en el comercio. Para este sector, tan duramente golpeado desde octubre de 2019, diciembre representa el mes con mayores ventas, pero dadas las actuales condiciones de confinamiento, la realidad se avizora difícil más allá de las perspectivas de mayor circulante.
En ese contexto, uno de los grandes desafíos que tendrá el comercio será adaptarse a las nuevas tecnologías y ajustar sus canales de venta de la presencialidad a la virtualidad. Deben dar un paso muy rápido hacia un mercado digital que les ayude a mejorar sus ventas y formarse en mercados digitales o Market Place, que serán los nuevos centros comerciales del futuro.
Con todo, aunque diciembre sea uno de los meses más esperados para el comercio minorista y mayorista, pues les permite cerrar su año con altos ingresos, este será un fin de año distinto que obligará a muchas personas a dosificar sus niveles de gasto. No obstante, el dinero de las AFP, les dará más margen a quienes tengan opción de retirar.
¿Habrá un tercero
En el actual contexto, la duda que surge tanto en la población como en las empresas e inversionistas es si habrá un tercer retiro. Frente a la imposibilidad de lograr una vacunación masiva antes de otoño, cabe preguntarse si en marzo o abril se estipulará un nuevo retiro con todos los efectos que esta medida genera.
Se debe recordar que cuando se planteó por primera vez este proyecto, se dijo que era excepcional y por una única vez. Aprobado un segundo retiro, el efecto en la credibilidad es evidente, pues los agentes económicos requieren reglas confiables, estabilidad y un marco regulatorio que les permita hacer proyecciones. Aun cuando se reconoce la difícil situación que experimentan muchas familias, dos retiros de los fondos previsionales no son la mejor respuesta desde las políticas públicas.
Nuestro sistema de pensiones requiere cambios urgentes que permitan aumentar los montos ahorrados y los retiros van precisamente en la dirección opuesta. Cabe preguntarse ¿qué sucederá con las más de 4 millones de personas que se quedarán sin fondos de pensiones? O ¿qué pasará con las personas de clase media que no clasifican para optar al pilar solidario y que han visto disminuidos notablemente sus ahorros? Los retiros, que se podrían ver como una opción inevitable tomando en cuenta la actual situación, comprometen seriamente el crecimiento y la inversión en el país considerando la merma en los ahorros. Además, afectarán a los futuros pensionados que tendrán escasos fondos a los que recurrir cuando empiecen su merecida etapa de descanso. Como es evidente, la cuenta por los actuales retiros la deberán pagar el Estado y las familias en algunos años más. Nada es gratis.