
Al cierre del primer semestre la utilidad de Tanner, una de las empresas financieras no bancarias más grandes de Chile, totalizó $10.453 millones.
Si bien esta cifra implica un retroceso de 30,1% en relación con el mismo período del año pasado, se evalúa positivamente en el contexto actual.
En tanto, las colocaciones netas de la compañía totalizaron $ 1.081.959 millones, lo que representa una disminución de 16,9% respecto de diciembre 2019. Esto se explica por las caídas de 21,2% y de 4,3% que experimentaron en sus colocaciones las divisiones empresas y automotriz, respectivamente.
Gustavo Inostroza, CFO de Tanner, resaltó que “la consolidación de nuestra estrategia que mantiene un alto nivel de solvencia y una adecuada diversificación de fuentes de financiamiento permitió que fuéramos uno de los pocos actores del mercado que continuó colocando efectos de comercio desde marzo a la fecha, y sumáramos nuevas fuentes de financiamiento, como el crédito por US$50 millones suscrito con el brazo financiero de Cargill”.
Inostroza también destacó que “frente a este desafiante escenario, Tanner ha demostrado la fortaleza de su modelo de negocios diversificado, lo que ha permitido seguir apoyando a nuestros clientes en este contexto desafiante, donde buscamos llegar especialmente a las pymes que son los actores que más requieren financiamiento”.
A su vez, destacó que el nivel de riesgo de la cartera ha sido contenido adecuadamente, registrando una mora mayor a 90 días de 3,7%.