El doctor Igor Wilkomirsky fue catalogado como el inventor más prolífico de Chile. En esta entrevista, el ingeniero civil químico comenta sus funciones como académico de la UdeC y el aporte que ha realizado a la industria metalúrgica a través de sus innovadoras creaciones.
Gran parte de su carrera profesional la ha realizado en el Departamento de Ingeniería y Metalúrgica de la Universidad de Concepción. Con más de 40 años estudiando y trabajando en la casa de estudios, el Dr. Igor Wilkomirsky se alza como un académico de alto prestigio a nivel nacional e internacional.
Ha sido el motor de más 60 proyectos patentados en su área, que han sido fundamentales para el desarrollo especialidades como la metalurgia y la minería. Gracias a estos proyectos, se ha hecho acreedor de múltiples galardones.
El académico comenta cómo ha sido su trabajo en la universidad, destaca cuales han sido sus principales invenciones y señala el aporte de la UdeC al trabajo de la industria.
– ¿Cómo ha sido el desarrollo de su carrera profesional?
– Mi carrera se ha centrado en el Departamento de Ingeniería Metalúrgica de la UdeC. Trabajé algunos años en Huachipato y Canadá. A nivel académico, el Departamento de Metalúrgica tiene un prestigio único porque es el primero de Chile y Sudamérica. El trabajo que se ha realizado en él, ha marcado la pauta para muchos ingenieros y profesionales que están repartidos por Chile y el mundo.
– Su trabajo ha sido fundamental para el desarrollo de la metalurgia, ¿Cuáles han sido las principales áreas de progreso?
– Una parte importante del trabajo ejecutado es en el área de procesos. Por ejemplo, en temas de procesos cómo la transformación de minerales hasta llegar al metal refinado, como el cobre electrolítico, que es el producto que Chile exporta en mayor cantidad. Hemos desarrollado bastantes tecnologías que van desde la extracción del mineral hasta llegar a la refinación electrolítica a través de procesos pirometalúrgicos. Estos procesos forman una parte importante de desarrollos tecnológicos que están patentados. También trabajamos bastante en lo que es el diseño de equipos de procesamiento de metales y concentrados para tratar materiales a alta temperatura. Hay una cantidad importante de desarrollos, no menores, en las que hemos aportado a la industria minera nacional.
– Un reflejo de este trabajo es la cantidad de patentes inscritas, ¿Qué tan claves son para garantizar el nivel de productividad?
– Para presentar una patente, tenemos que tener una idea probada en detalle. Hemos tenido la suerte de que en el área en la que estamos inmersos, es posible hacer desarrollos que pueden ser patentados porque son originales. Tenemos cierta ventaja frente a otras especialidades. Aprovechamos esta ventaja y ya tenemos cerca de 60 proyectos patentados, de los cuales, 20 o 21 son en otros países, como Estados Unidos o China.
– ¿Cuál considera que es su aporte al desarrollo académico de la UdeC en esta materia?
– Las funciones que tengo como profesor son bien claras. Una es hacer clases a estudiantes de pregrado y postgrado. Por otra parte, debemos hacer investigación fundamental y aplicada, además de difusión. En particular, tenemos que publicar en revistas de relevancia internacional. Esta función es muy importante porque pone a la UdeC bajo el escrutinio de nuestros pares de otras universidades. Debemos agradecer a la UdeC porque nos permite desarrollarnos en base a lo que trabajamos.
– Usted se caracteriza por su creatividad, ¿cuáles son sus principales invenciones?
– Hay muchas invenciones interesantes. Sin embargo, a modo personal, considero que la más trascendente es el nuevo sistema de fundición de concentrados de cobre y remoción de arsénicos, que son bien relevantes. Hay otro proyecto para producir compuestos insolubles de arsénicos que pueden ser depositados en botaderos.
– ¿Qué proyectos están trabajando actualmente?
– El más reciente que estamos promoviendo, es un reemplazo a las fundiciones normales de cobre que tienen bastantes problemas y que puede funcionar como una alternativa muy ventajosa frente a la tecnología actual. Además, estoy trabajando en otros proyectos contratados por empresas relacionadas al litio. También, hemos hecho desarrollos en esta materia que están patentados.
– Con todo lo realizado, ¿se han abierto puertas para los estudiantes de la UdeC?
– Es una función que uno tiene que ejecutar como académico. Debemos abrir puertas para nuestros graduados. El sello Universidad de Concepción, le otorga una posición de garantía a nuestros profesionales. Tenemos ex alumnos que hoy están en puestos laborales muy buenos. Es agradable ver cómo nuestros jóvenes se convierten en grandes profesionales.