La directora departamento administración Facea UdeC destacó los efectos de la pandemia en el ecosistema emprendedor, y abordó los desafíos
Los efectos económicos de la pandemia que han llevado al Banco Central corregir a la baja el crecimiento de Chile para este año en hasta -7,5%, constituye una grave amenaza al surgimiento y desarrollo de emprendimientos locales que en condiciones normales podrían significar un motor de reactivación importante para el país.
Así lo asegura la ingeniero comercial y directora del Departamento de Administración de la Facea Universidad de Concepción, Michelle Tobar.
-¿Cuáles son las amenazas para la innovación?
-La innovación vista como una herramienta de competitividad sin duda hoy no cuenta con un escenario que favorezca y potencie las capacidades de implementación en las organizaciones y empresas del país, ya sea porque las instituciones buscan disminuir ciertas inversiones que “no rentabilizan a corto plazo”, o bien priorizan aquellas de primera necesidad.
-¿Qué pasa con el ecosistema emprendedor?
En paralelo, el mundo emprendedor se ha visto de cierta forma invadido por una sensación de temor producto de la incertidumbre y la evidente merma de sus ingresos. Tal como ha quedado en evidencia, y han advertido diversos especialistas, el emprendimiento ha sido afectado no solo por cuestiones económicas sino también por un tema de movilidad producto de la crisis sanitaria, el empleo por cuenta propia se hace cada vez más complejo, muchas pymes hoy se encuentran sin liquidez y con riesgo incluso de quiebra.
-Se habla mucho de reinventarse
– No es fácil “reinventarse” y tratar de ingresar con un producto o servicio nuevo a un mercado tan turbulento e incierto como el actual. Las personas han restringido sus gastos, han priorizado el consumo de bienes y servicios de primera necesidad, y poco espacio queda para la búsqueda de nuevas experiencias en consumo.
-El Gobierno ha ofrecido ayuda estatal…
-Si bien hoy, el Gobierno ha impulsado medidas para apoyar la emergencia de las familias y sus hogares, todo lo anterior hace que sea urgente pensar en la necesidad de que a futuro se tomen acciones que vayan con mayor fuerza en dirección a apoyar la reactivación de la inversión, el emprendimiento y la innovación.
-¿Qué modelos de negocio cree que más sufrirán con esta crisis y cuáles podrían surgir o mejorar?.
-Ha sido evidente que esta crisis y las medidas que se han adoptado para enfrentarla, han llevado a las empresas a tomar decisiones muchas veces radicales para poder sobrevivir, esto es, despidos, cambio en los modelos de negocio, tecnologización de sus procesos, paralización de algunas actividades, etc. lo que ha sido particularmente difícil para aquellas empresas cuyos modelos de negocio son más bien tradicionales.
El aislamiento físico que hemos debido adoptar como sociedad, ha sido un desafío para todos, para la comunidad, el ecosistema emprendedor y las empresas en general. Esto ha hecho que aquellas empresas que no cuentan con modelos de negocio flexibles, han debido asumir mayores costos en términos de adaptación al nuevo escenario (como los mencionados anteriormente); por su parte, han podido enfrentar mejor esta crisis aquellas que han asumido como una oportunidad el optar por teletrabajo, plantearse la opción del comercio electrónico e incluso, cuando corresponde, permitirse modelos de negocio que incluyan por ejemplo, el delivery.