Economía y Negocios

Madre Tierra, la recicladora penquista que trabaja sin parar en medio de la pandemia

Francisco y Raúl Ulloa son los hermanos que parte de esta microempresa, que ha tenido buena respuesta en medio de la crisis sanitaria.

Por: Felipe Placencia 10 de Junio 2020
Fotografía: Cedida

Francisco Ulloa trabajaba en una reconocida empresa penquista. Su amor por la naturaleza y las ganas de aportar por un mundo mejor, lo hicieron decidir por dejar su puesto y comenzar un emprendimiento ecológico.

Así nació la comercializadora “Madre Tierra”, iniciativa a la que se sumó su hermano Raúl. Su especialidad hoy es el reciclaje domiciliario y en medio de la pandemia se han ganado un espacio en este segmento que va creciendo en el Gran Concepción.

Es que en tiempos de crisis sanitaria, en sectores residenciales donde los trabajadores han podido quedarse en casa (en la medida de lo posible), también se generan efectos colaterales como el incremento de basura.

De ahí que muchas comunidades que no contaban con un servicio de reciclaje, se vieron en la necesidad de optar por una alternativa que ojalá que no signifique un aumento mayor en los gastos comunes y tengan los resguardos ante el coronavirus.

“Nosotros tenemos planes variados. Por ejemplo, el orientado para condominios tiene un valor mensual de $25 mil y consiste en una estación metálica para botellas plásticas, latas de bebidas y cervezas. Un tambor plástico pintado para tetrapack, otro para botellas de vidrio, pudiendo agregarse una unidad para cartones, papeles y revistas. Se retira una vez por semana.

“Es impresionante la cantidad que retiramos de los domicilios”, dijo Francisco Ulloa, quien además inició una campaña para que en las botellas plásticas que desechen en su interior vayan bolsas de papas fritas, snaks, chocolates, bolsas de nylon, entre otras, que tendrán una misión. “Se transformarán en ecoladrillos para construir basureros ecológicos”, adelantó.

Etiquetas