Muy buenas noticias para el mundo pesquero artesanal, especialmente pelágico, las entregó el Instituto Nacional de Estadísticas, que dio cuenta de un aumento de 67% del desembarque pesquero durante abril respecto a mismo mes de 2019. El sector pesquero en su totalidad, presentó un alza de 40,6%.

Sin embargo, los pescadores de menor escala, están muy apremiados, lo que ha impulsado una campaña de ayuda por parte de la Ferepa Bío Bío (www.ferepabiobio.cl) y también ha unido a los sectores artesanal e industrial que han solicitado al Gobierno que acelere la canalización de ayuda.

Para el presidente de la Ferepa, Hugo Arancibia, fue “una torpeza del Ejecutivo” el haber suspendido el bono de $150.000 a días de ser entregado, y sustituirlo por el Ingreso Único Familiar.

“Del estimado que teníamos de 5.000 familias, yo creo que al 25%-30% le llegará el apoyo”, proyectó Arancibia, por lo que solicitó más apoyo al sector.

En la misma línea, la presidenta de Asipes, Macarena Cepeda, dijo que “pese a que las cifras continúan mostrando que el sector artesanal en general desembarca un poco más del 60% de los recursos pesqueros, vemos con preocupación la situación social de los pescadores artesanales de menor escala. Hacemos un llamado al Gobierno a acelerar la entrega de ayuda a este sector y proveer de soluciones estructurales que les permitan un mejor pasar”.

A modo de ejemplo, dijo, han propuesto que se mejore la calidad de los derechos históricos de pesca de estos actores. “Es urgente dotarlos de mayor flexibilidad, lo que permitiría que puedan administrar mejor sus permisos y recursos, organizar su flota o transferirse cuotas entre ellos, para ser más sostenibles.

Puntal económico

Contrastando con el sector industrial, el sector industrial anotó una disminución de 2,1% interanual.
Macarena Cepeda dijo que estas cifras de abril reflejan varios temas de fondo y otros coyunturales.

En los temas de fondo, explicó, la pesca industrial atraviesa por una situación de estabilidad producto de la recuperación sostenida de los recursos pesqueros, lo que permite el funcionamiento de barcos, plantas y actividades ligadas, donde trabajan del orden de 6.500 personas de manera directa y otras 4 mil de manera indirecta.

“De todos modos, el sector aun resiente los resultados de la Ley de Jibia, que ocasionó la pérdida de unos 2 mil empleos y de una destrucción de valor en nuestra zona, como muy pocas veces hemos visto en nuestro sector”.

También catalogó de positivo la recuperación de los recursos pesqueros artesanal de mayor escala, que provee de sardina y anchoveta, “Han podido mantener y aumentar su volumen de descarga, con el consiguiente beneficio económico para todos quienes trabajan en este sector. Esta asociatividad ha sido un puntal económico para todos en estos tiempos difíciles”, reconoció la presidenta de Asipes.
En tanto, el seremi de Economía, Mauricio Gutiérrez, destacó los protocolos sanitarios definidos, consensuados y cumplidos, lo que hizo viable la actividad pese a la pandemia, con el consiguiente beneficio económico de muchas familias de la Región del Bío Bío.