Sepa cómo cuidar el presupuesto del hogar ante efectos del Covid-19
26 de Marzo 2020 | Publicado por: Edgardo Mora
Economista sugiere saber cuánto bajarán nuestros ingresos y hacer una lista de gastos evitables junto con ver si son fijos o variables y evaluar costos de créditos y renegociaciones.
Tras las consecuencias económicas derivadas del Covid-19 como el alza continuada del dólar o las bajas expectativas de crecimiento para 2020, entre otros efectos, es bueno preparar los bolsillos.
Es por lo anterior, que consultamos a Claudio Parés, doctor en Economía y director del Departamento de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Concepción, sobre cuáles son los principales aspectos a considerar a la hora de cuidar el presupuesto del hogar.
-¿Es importante crear un presupuesto para mejorar la economía familiar?
– A decir verdad, siempre es importante tener claro el presupuesto del hogar. Así como uno sabe cuánto gana con más o menos seguridad (dependiendo de lo que haga), también sabe cuánto gasta. Normalmente, uno ajusta los gastos corrientes a sus ingresos, por estos días es importante sacar las cuentas de cuánto bajarán nuestros ingresos y hacer la lista de los gastos que podemos evitar.
– ¿Qué elementos debe considerar un buen presupuesto del hogar?
– Un presupuesto se empieza siempre desde los ingresos. Aquí hay que considerar si estos son fijos o variables. Si son variables, hay que calcular un promedio “conservador” que permita mantener un fondo de reserva (un “colchoncito”) en caso de emergencia.
Luego, es necesario hacer una lista de los gastos, ojalá priorizados. Casa (dividendo o arriendo), agua, luz, gas y comida, teniendo claro cuáles son fijos y cuáles variables también, para ver en qué podemos ahorrar y en qué podemos darnos un “gustito” de vez en cuando.
Si tenemos deudas, es importante tener claro cuánto cuesta cada crédito, es decir, la tasa de interés. Además de los créditos de consumo propiamente tal, tenemos líneas de crédito y tarjetas que tienen costos distintos. Las últimas suelen ser las más caras y las que uno debería intentar pagar cuanto antes, aunque hay excepciones en las tarjetas cuando se hacen pagos a 0% de interés. Este punto debe incluirse en la lista de gastos.
– ¿Es bueno calcular el patrimonio neto?, ¿qué es y por qué sería bueno?
– Es importante conocer su patrimonio, pero en la práctica se hace complicado calcular un monto exacto. Esto porque el patrimonio se compone de las cosas que tenemos (casa, auto, etc.) y, para obtener el “neto” debemos restar las cosas que debemos (créditos). Si debemos más de lo que tenemos, estamos técnicamente en quiebra. Si con el presupuesto mensual no estamos generando saldos positivos o “ahorros” mensualmente, tenemos serios problemas: hay que reducir los gastos o aumentar los ingresos como sea.
– ¿En qué casos es recomendable renegociar deudas y cuál sería la mejor forma de hacerlo?
– Siempre que se tienen deudas es bueno saber cuánto se está pagando por ellas. Y más que la cuota, la tasa (o CAE). Hemos mantenido en el último tiempo tasas a la baja por lo que, en tanto tengamos la posibilidad de renegociar ese costo de tasa a la baja, deberíamos buscar una renegociación.
De todas maneras, es importante entender que un crédito consiste en “traer dinero del futuro” para usarlo ahora, por lo que hay que estar más o menos seguros de que tendremos dinero para pagar la deuda en el futuro. Entonces, la mejor forma de renegociar un crédito es ser ordenado y buscar el mejor CAE.
– ¿Qué medidas anunciadas por el gobierno podrían ayudar a la economía del hogar?
– Las medidas que ha anunciado el gobierno son importantes porque facilitan a las familias ordenarse. Da un respiro en términos de lo que debemos resolver en lo inmediato, pero debemos estar atentos al lado “real” de la economía. Si bien las finanzas nos permiten ordenar ingresos y egresos, guardando recursos para usarlos después o permitiendo compromisos para usar hoy recursos futuros, no debemos olvidar que hay que generar recursos para poder consumirlos. Si mantenemos durante demasiado tiempo un nivel de ingresos “a medias”, tendremos que acostumbrarnos a gastar menos. No podemos mantener gastos a punta de deuda. Menos a nivel global. Es necesario ajustar la actividad, ingresos y gastos, a lo que realmente podemos hacer.