Ximena Perone siempre tuvo una relación arraigada con el mar. Sus bisabuelos, a inicios del siglo XX tras llegar de Nápoles, compraron el fundo Perone en la homónima caleta, donde ahora ella desarrolla, con sentido gastronómico y social, el cultivo de la Tetragonia, espinaca endémica de Nueva Zelanda, y la Red de Recolectores de Productos Silvestres del Bío Bío, compuesta por 25 personas, con la que llegan con sus frutos a los mejores restaurantes de Chile.
Producto de su trabajo en TVN, la periodista llevó en 2015 hasta caleta Chome al chef, Rodolfo Guzmán, dueño del restaurante Boragó, reconocido como el primero en Chile y 27 en el mundo, con quien recorrió la playa para descubrir qué alimentos eran comestibles, pero aún desconocidos, fue así como hallaron la espinaca, base de alimentación Maorí, que el chef quería para su restaurante.
En ese momento, surgió, según dijo, la idea imparable de generar el cultivo en caleta Perone. “En esto Rodolfo fue vital, creyó en mí y desde ahí nació Chaltumay Spa, una red de recolectores de productos silvestres del Bío Bío que lleva a los mejores restaurantes de Santiago y Concepción la identidad silvestre y territorial de Bío Bío”.
Renunció a TVN, y a toda una vida de reporteo y apostó por la vida independiente, aunque sin dejar el periodismo de lado, pues cuando partió con la red durante cuatro meses no tuvo ingresos. “Comencé ayudando y construyendo confianzas con mis recolectoras. Iba por los productos, los seleccionaba y enviaba a Santiago. Fueron cuatro meses sin ganar nada, pero sí ganaba la confianza de ellos (…) Una vez que tomó más fuerza, el concepto de Despensa Silvestre del Bío Bío casi no se oía, decidí crear Chaltumay”.
Con el tiempo creó la primera huerta halófita de Latinoamérica, donde cultivan Tetragonia y espera, una vez que pueda hacer uso de su campo, que está en proceso de escritura, contar con otras especies como: chaguales, oxális o trébol de playa, espinacas y flores comestibles, entre otras.
Sus sueños los comparte con sus hijos Roberto (5) y Antonia (9), quienes muchas veces le ayudan a recolectar y visitar a los campesinos de diferentes localidades de la Región con los que trabaja recolectando frutos del arrayán, nalcas, loyos, morchelas, digueñes, lleukes, murtillas, maqui y algas, entre otros, dependiendo de la temporada.
Perone, que en 2018 obtuvo el premio Fruto de Oro que entrega el festival gastronómico Ombligo Parao de Santiago y, además fue elegida por La Tercera como parte de los Jóvenes Líderes , aseguró que la tarea no ha sido fácil por falta de tiempo y recursos. “Todo lo he logrado con recursos que casi no existen, a veces la periodista mantiene a Chaltumay y otras es al revés”.
A futuro, Perone quiere crear un centro de Interpretación de Flora Comestible Costera en el campo de la península de Hualpén y desarrollarlo con los habitantes de caletas aledañas, que sea un lugar de investigación para estudiantes de gastronomía y fortalecer la Red Chaltumay, expandiendo su trabajo a otros lugares del país.