Participación de los sueldos en los costos totales es mayor. También subiría el valor de gratificaciones y horas extras.
Tras sellarse el acuerdo sobre el aumento del sueldo mínimo a $ 300 mil, a partir de marzo de 2019, gremios, empresarios y actores regionales hacen un balance preliminar acerca de la medida.
En general, existe acuerdo entre los consultados respecto de que las Pymes serían el sector más afectado, por cuanto son quienes más absorben mano de obra con sueldos cercanos al mínimo.
Por otra parte, si bien es cierto que ninguna familia puede hoy día sobrevivir con $300 mil al mes, implicará un avance para un amplio sector de la sociedad que vive en situación de vulnerabilidad.
Osvaldo Leiva, empresario maderero y presidente de Pymemad afirma que “las Pymes, en general, son muy intensivas en mano de obra a diferencia de las grandes compañías que son muy intensivas en capital, muy tecnificadas y con personal calificado, cuyos salarios son muy superiores a los del salario mínimo. Por lo anterior, cualquier variación de costo que se produzca, el verdadero efecto lo recibe la Pyme que tiene proporcionalmente más personal, cuyos salarios son más próximos al mínimo y la participación de los sueldos en los costos totales es mayor”.
En tanto, Marco Orellana, presidente de A.G. Met Bío Bío, gremio metalmecánico, comenta: “celebramos la mejora de los sueldos mínimos. En nuestro sector, dado el nivel de calificación de nuestros trabajadores, esta modificación no tiene una incidencia significativa. Sí afecta directamente a las empresas, la contratación desleal de mano de obra extranjera, en formatos reñidos con nuestra legislación, y es necesario fomentar mayores programas de perfeccionamiento productivo para nuestros trabajadores”.
Desde la CUT provincial, Sergio Gatica reconoce que “el reajuste al salario mínimo es absolutamente insuficiente, sin embargo, ayudará a mejorar las condiciones de aproximadamente 800.000 trabajadores que ganan sólo el ingreso mínimo. También beneficiará a todos los trabajadores, en el aumento de la gratificación y las horas extras, que se calculan por el ingreso mínimo”.
Desde la academia, Andrés Ulloa, ex decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas (Facea) de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, (Ucsc) señala: “solo las empresas que tienen una alta proporción de trabajadores con pago de salario mínimo podrían verse afectadas y, en tal caso, podrían realizar un ajuste en el empleo y es probable que sean algunas de las MiPymes las que están en esta situación”. Pero también recuerda que “dadas las mejores expectativas de crecimiento económico para este y los próximos años, es probable que se ajusten y no generen impactos importantes”.
Por su parte, Luis Méndez, desde el Observatorio Laboral Bío Bío, señala que: “los empresarios, sobre todo, los medianos y pequeños, ven sobrecargada su estructura de costos que no siempre pueden traspasar a los precios, los gobiernos, por su parte, deben mediar a riesgo de que si los costos salariales son traspasados a los precios, se produzca un grave problema de “espiral de precios y salarios”, que terminaría por derribar cualquier política antiinflacionaria, cuyos costos, finalmente, afectarían a todo el país y, principalmente, a las personas de menores ingresos”. En este sentido, agrega Méndez, “ lo prudente es que los reajustes salariales sean de acuerdo con los incrementos de productividad, esta, además de permitir mayores ingresos, tiene por sí mismo, un efecto de ayudar a controlar la inflación”.
El seremi de Economía, Mauricio Gutiérrez, indica que “un salario de $300.000 es insuficiente para una familia, pero tampoco podemos decir que no se pueden pagar salarios de $300.000, porque eso hace que las empresas no puedan pagarlos y prescindan de la mano de obra”.
Jorge Martínez, empresario Pyme y gerente general de Mar de Lagos, una empresa con el sello laboral de excelencia, comenta: “me parece una medida que está fuera de los tiempos modernos, ya que sólo afectará a las pequeñas empresas, porque las medianas y las grandes empresas pagan sueldos mayores al ingreso mínimo”.
Ronald Ruf, gerente general de la de la Cámara de la Producción y el Comercio de Concepción (Cpcc), señala que “la propuesta actualmente aprobada por la Cámara de Diputados demandará un esfuerzo del empresariado, especialmente de las Pymes que vienen de un periodo económico ajustado. Sin embargo, visualizamos una oportunidad, ya que se trata de incrementos que por una parte, permitirán mejorar paulatinamente los ingresos de quienes perciben el salario mínimo y desde la mirada de la empresa, la negociación plurianual permitirá mayores certezas en materia de proyección presupuestaria”.