BBVA cerró la venta del 68% de su participación directa en BBVA Chile, por el precio de US$2.200 millones, que había informado el pasado 28 de noviembre a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de España.
De acuerdo a un documento enviado al regulador español, BBVA informó esta mañana que la familia Said, dueña del 31,62% de la filial chilena, renunció a su derecho preferente licitando parte o todas sus acciones en la OPA que realizará Scotiabank.
“Los Accionistas Mayoritarios No Controladores de BBVA Chile han renunciado a los derechos de adquisición preferente y de acompañamiento derivados del pacto de accionistas y, por lo tanto, en el día de hoy, BBVA ha aceptado la Oferta y suscrito el acuerdo de venta con The Bank of Nova Scotia” señala el documento. Sin embargo, precisa el texto, se reservan el derecho de licitar todos o parte de sus acciones en la oferta pública de adquisición obligatoria que lleva a cabo Scotiabank.
Es más, la familia Said manifestó su intención de quedarse en la propiedad, y para hacerlo, invertiría unos US$500 millones para convertirse en dueño de hasta el 25% del banco fusionado.
Según informó el banco canadiense, de concretarse la operación, esta tendrá un impacto en el coeficiente de capital ordinario de nivel 1 sería de aproximadamente 135 puntos bases, “si la operación concluye y la familia Said vende todas sus acciones a Scotiabank”.
Desde ese banco, su presidente y director general, Brian Porter, señaló que “nos da gusto haber llegado a un acuerdo con BBVA para adquirir sus acciones de BBVA Chile y nos entusiasma esta alianza con la familia Said y la oportunidad de construir un banco mejor en Chile”.
En tanto, el CEO & Country Head de Scotiabank Chile, Francisco Sardón, explicó que “nuestro propósito con esta adquisición es tener la escala suficiente para permitir a Scotiabank atender a su amplia base de clientes de la Banca Retail y de la Banca Mayorista de la mejor manera posible, brindándoles productos y servicios del más alto nivel en Chile y en el extranjero”. “Igualmente vamos a conformar el mejor equipo profesional del sistema financiero chileno”, agregó.
Cabe recordar que la salida del banco del país se debe a la baja rentabilidad que significaba para la entidad el negocio en Chile debido a que le ha sido difícil crecer en tamaño y competir en igualdad de condiciones con las entidades de más peso dentro de la banca local. De hecho, la filial local de BBVA solo tenía el 7% de cuota de mercado.