Retail se suma a la batalla contra la contaminación plástica oceánica
25 de Noviembre 2017 | Publicado por: Javier Ochoa
En Chile circulan anualmente 3.400 millones de bolsas desechables, y se proyecta que a media-dos de siglo haya más plástico que peces en los océanos. Pero ya están surgiendo soluciones.
El pasado 25 de octubre Chile dio un paso gigantesco en la lucha contra la contaminación plástica que afecta a los océanos del mundo, al firmarse el proyecto de ley, por parte de la Presidenta Michelle Bachelet, que prohíbe el uso de bolsas plásticas en 102 comunas costeras del país.
El problema.
Estudios del medio marino apuntan que por año las aguas reciben entre 5 y 13 millones de toneladas de plástico. Y los pronósticos para 2050 son catastróficos: si en 10 años se calcula que habrá una tonelada de plásticos por cada 3 toneladas de peces, para 2050 se espera que la proporción se invierta: las últimas estimaciones del Programa de las Naciones Unidas para el Ambiente prevén que hacia mediados de siglo la cantidad de plástico que flota supere al número de peces que nadan.
De ahí la importancia de la firma de este proyecto, que pondría a Chile adelante en el manejo de este grave problema ambiental.
Soluciones
En paralelo, diversas acciones se están llevando a cabo para reducir o eliminar el uso de bolsas plásticas.
Desde ordenanzas municipales como la de Hualpén, que prohibió su uso en supermercados, o de Concepción, que autorizó un máximo de tres bolsas por compra, hasta la más reciente e importante por su impacto: la de tiendas Paris, que a partir del 1 de diciembre próximo, eliminará totalmente sus bolsas plásticas a lo largo de todo el territorio nacional, acción inédita en este segmento comercial y que impone presión al resto de los actores del retail.
Anualmente, la multitienda entrega 30 millones de bolsas plásticas, medida que conseguirá sacar de circulación 675 toneladas convirtiendo este proyecto en un aporte concreto respecto del cuidado del medio ambiente. Las cifras son alarmantes, sólo en Chile anualmente circulan 3 mil 400 millones de bolsas plásticas desechables que, a raíz de su composición y densidad podrían eventualmente demorar 400 ó 500 años en degradarse provocando un gran impacto ambiental, sobre todo en el mar cuya contaminación está compuesta entre un 80% y un 90% por este material. “Esto deja en evidencia la crisis ambiental que viven los océanos hoy”, explicó la subgerente de Sostenibilidad de Paris, Fernanda Klüever.
Dado lo anterior, es que a contar del 1 de diciembre, en tiendas Paris habrá diferentes alternativas para los clientes, anunció. Una de ellas será la entrega gratuita de una bolsa de papel certificado -proveniente de bosques manejados de manera responsable en términos sociales y medioambientales- esto porque el papel se biodegrada más rápido y es mucho más fácil de reciclar. Pero estas bolsas no serán las únicas. Además existirán 3 alternativas más de bolsas reutilizables para que los clientes puedan adquirir la que más se adapte a sus necesidades.
“Queremos ser pioneros en este cambio, lo que nos moviliza a hacerlo es la grave problema ambiental que hoy viven nuestros océanos, playas y el medio ambiente en general. Estamos trabajando desde hace 4 años para implementar este proyecto de una forma impecable y que sea un beneficio para nuestro entorno”, explica Fernanda Klüever, subgerente de Sostenibilidad Paris.
Si bien, el plástico y el papel tienen un impacto ambiental, es éste último es el más amigable con el medio ambiente, ya que su materia prima es natural. “Paris entiende que el camino correcto es impulsar un cambio de hábito, no sólo para los clientes o empresas, sino que en toda la sociedad, donde se dejen de usar bolsas desechables, incluso si éstas tienen un porcentaje menor de biomasa ya que finalmente, en el retail, ninguna de ellas es 100% biodegradable”, explicó la ejecutiva.
“Sin bolsa por favor”
“Para desarrollar un proyecto de esta envergadura se necesita tiempo. El primer paso fue trabajar con nuestros colaboradores y empezar desde adentro a modificar los distintos procesos de venta. El proceso de cambio los incluye a todos: Operación, Seguridad, Fuerza de Venta, Recursos Humanos. El segundo paso fue trabajar con nuestros clientes. Ellos son parte fundamental de este cambio y por eso es importante que entiendan el por qué estamos haciendo esto y el impacto que significa para una empresa que realice una apuesta medioambiental de esta magnitud. Que la gente se acostumbre a decir “Sin Bolsa Por Favor” es nuestro mayor objetivo”, sostuvo la sub gerente de sustentabilidad de Tiendas Paris, Fernanda Kluever.
Más alternativas
La empresa penquista Solubag inventaron las primeras bolsas, que además de ser biodegradables tienen como particularidad que son solubles al agua fría o caliente.
La materia prima base de estas bolsas nace del gas natural, que tiene múltiples aplicaciones.
Una de ellas es dar con un componente que se asemeja al plástico y es lo que Solubag ha trabajado.
“El producto es un PVA (polivinil alcohol) y por eso es que reacciona frente al agua. Tiene oxígeno e hidrógeno. Pero al aumentar las moléculas de oxígeno que viene dentro del agua, el material se descompone”, explica el gerente general de Solubag, Roberto Astete.
Bolsa Eco-solidaria
Y otro notable ejemplo es el que comanda Fundación Las Rosas, quien junto a la empresa Unibag, lanzaron la “Bolsa Eco-Solidaria”, artículo fabricado en Chile con materiales ecológicos y que estará prontamente a disposición del público.
“Estamos contribuyendo a un doble objetivo, por una parte cuidar el medioambiente y además apoyar el trabajo de la Fundación con los adultos mayores. En una primera etapa, esperamos que esta campaña permita reducir el uso de 20 millones de bolsas plásticas”, afirmó la gerente de Unibag, Eliana Moreno.
Las Bolsas Eco-Solidarias son 100% degradables, pues están confeccionadas en tela ecológica. Estas comenzarán a comercializarse desde el año próximo en todo el país, a través de supermercados, grandes tiendas y farmacias.