Es un destino apetecido y ya un clásico del turismo mundial, pero que obliga a asesorarse para evitar sorpresas desagradables o pagar de más. La directora comercial, Karen Reyes, radicada en la joya mexicana, promete un viaje inolvidable.
“Muchos gustan de los All Inclusive, pero lo que no saben es que algunos de los tours imperdibles de Cancún parten muy temprano y regresan ya después de almuerzo, por lo que ya estarían perdiendo dinero al no recibir ni desayuno ni almuerzo en su hotel”, explica la penquista y directora comercial de la agencia Chilmex, Karen Reyes, quien radicada en el destino mexicano, ofrece viajes a la medida de los requerimientos específicos de cada viajero chileno.
“Es importante saber un montón de cosas, de manera tal que el viaje en cuestión sea un buen y grato recuerdo, sin problemas, los que muchas veces comienzan a aparecer debido básicamente a desconocimiento y a las diferencias de las idiosincracias”, sostiene Karen Reyes.
Otro ejemplo, añade, se relaciona con los destinos en sí, ya que muchas veces contratan un paquete turístico al destino Cancún, pero después de un largo viaje, al llegar se dan cuenta que su hotel no está ahí, sino que en Playa del Carmen, distante a una hora y media en bus.
“Somos pioneros en esto, ya que somos una agencia de viajes para chilenos que opera en México, contando con una amplia red de servicios hoteleros y gastronómicos, exceptuando el viaje aéreo propiamente tal”.
Su esposo mexicano y director de Chilmex, Fabrizio Moya, también abarca la barrera idiomática, que pese a que se habla español en México y Chile, muchas veces se produce ruido comunicacional, lo que va mermando la calidad del servicio o lo placentero que debiera ser la estadía.
Y a esto, se le debe sumar el tema de la confianza, agrega Karen, ya que el chileno es por esencia desconfiado, sostiene quien ya lleva 17 años en el rubro turístico-hotelero.
“Tras trabajar con importante cadenas hoteleras, fui conociendo a los distintos operadores, con quienes hoy tengo trato directo, por eso, estoy gestionando alianzas con agencias de Concepción, de manera de ofrecerme como operador de ellos, pero con residencia en Cancún y sin intermediarios, lo que de por sí agiliza todo y se minimizan los problemas y la improvisación”, relata la directora.
Chilmex ofrece total flexibilidad, en el sentido que pueden adquirir desde sólo el servicio de transporte aeropuerto-hotel, pasando por tours gastronómicos, o de sitios de interés.
Lo importante, aclara el matrimonio, es que sus servicios no están condicionados a nada. Sólo se paga lo que el cliente quiere, explican.
Sobre los valores, algunos ejemplos son: una semana para 4 personas en un departamento, entre US$700 y mil dólares, lo que es conveniente si se piensa que un hotel all inclusive cuesta mínimo US$200 diarios.
Sobre cuál es la mejor temporada, la Navidad y Semana Santa son las fechas más fuertes, por lo mismo, las más caras. Pero enero-febrero chileno, es una muy buena oportunidad, sostuvieron.