Tras un fin de semana largo previo a los días de Fiestas Patrias, el comercio de Concepción obtuvo importantes dividendos en una de las fechas más esperadas del año por los emprendedores que apuestan por instalar ramadas.
Los costos operacionales y logísticos del Parque Bicentenario fueron financiados por la organización.
Y si bien tenían el respaldo de carabineros de Concepción durante día y noche, igualmente se reforzaron invirtiendo en seguridad privada.
En líneas generales, el balance realizado por la organización y los locatarios fue de éxito. La inversión realizada por los fonderos se recuperó rápido y hubo 3 días que fueron considerados íntegramente como jornadas de réditos, dada la alta afluencia de público.
“Realizamos una inversión cercana a los $10.000.000. Recuperamos lo invertido y sacamos ganancias. Imaginábamos que sería mucho más. Sin embargo, no podemos quejarnos. Cuando saquemos cuentas al final, creo que el balance será bastante positivo”, comentó Patricio Bravo, coordinador de la Gran Ramada de Violeta Parra.
Por su parte, el productor general, Oscar Cravero, del evento manifestó que “hablando con los comerciantes uno percibe su satisfacción. Tuvimos mucho público que vino a disfrutar, entretenerse y consumir nuestros productos. En líneas generales, fueron unas Fiestas Patrias muy rentables. La cuentas el día domingo ya eran alegres”.
Los locatarios dentro de la gran ramada del Parque Bicentenario tuvieron que postular a una licitación municipal a través de Chile Compra.
El oferente que ganó la concesión para este año 2017 fue Oscar Cravero, quién fue el encargado de vender todos los puestos establecidos para esta actividad.
Los locatarios que se adjudicaron un espacio al interior de la Gran Ramada de Concepción en 2017 tuvieron que cancelar aproximadamente $150.000 por metro lineal del espacio que arrendaron por los cinco días de duración que tuvo las Fiestas Patrias en 2017.
Con los montos cancelados, la organización se encargó de pagar los costos logísticos de la ramada y el sector donde se ubicó.
“El valor cancelado sirvió para financiar la carpa, agua, la electricidad y la seguridad del sector. Nos encargamos costear todo lo relativo a la logística. La municipalidad entregó todas las facilidades para hacer cumplir con las expectativas de la gente”, explicó Oscar Cravero, quien espera que el próximo año sea igual de excelente que este.