Ayer el dólar volvió a profundizar sus caídas y registró su séptima jornada a la baja anotando mínimos desde junio de 2015. Así, el billete verde se cotizó en $625,70 vendedor y $625,20 comprador.
La Asociación de Exportadores de Frutas de Chile, Asoex, informó que no les preocupa que el dólar se mueva dentro de la banda entre $670 y $ 640, ya que es algo que vienen observando por un período largo de tiempo.
“Sí nos mantenemos muy atentos cuando el dólar baja de este piso, como está ocurriendo desde el 24 de este mes. Sin duda que esta situación pone en alerta al sector. Aunque cabe mencionar que existen instrumentos de cobertura a los que los exportadores pueden acceder para asegurar un tipo de cambio competitivo para cuando hagan sus mayores esfuerzos de exportación. En este sentido, son las empresas las que deben decidir cuáles son los resguardos que mejor sostienen su competitividad No mucho se puede hacer con respecto a los movimientos de variables internacionales. Pero sin duda que estaremos atentos a la evolución de las condiciones macroeconómicas para los exportadores de frutas de Chile”.
El economista de la Universidad de Concepción, Víctor Hernández, expresó que esta situación beneficia a aquellas empresas que están demandando bienes de capital.
“También es positivo para la economía el hecho de que esto se conjuga con una baja en el precio del petróleo y en el costo de importación debido al tipo de cambio, al tiempo que disminuye la presión inflacionaria, lo que a su vez abre espacio para que el Banco Central tenga márgenes de holgura para desarrollar una política monetaria más expansiva, a través de una baja de la tasa de interés, lo que sería una buena señal para los inversionistas debido al costo del financiamiento, y por cierto, también para los consumidores”.
No obstante, el docente de Ingeniería en Administración de Duoc UC sede Concepción, Claudio Sánchez, habló más bien de efecto transitorio.
“No está claro que este efecto de caída en la cotización del dólar (y del cobre) sea permanente. Estudio del BCI sitúan el precio del dólar cerca de los $650 hacia fines de año, lo que junto a una estabilización y potencial caída en la cotización del cobre, llevarían a que la actual situación del dólar tuviera efectos transitorios”.
La académica de ingeniería Comercial de la USS, Daniela Catalán, planteó que probablemente los sectores forestal, agropecuario, pesquero, metalúrgico, entre otros, podrán verse afectados por esta baja del precio del dólar, pues son los principales sectores exportadores. “Tendrán que asumir que seremos menos competitivos comparativamente al resto del mundo”.