Frutos ha dado la nueva mirada de ambos gobiernos, ya que después de diez años, el energético vuelve a Bío Bío bajo la modalidad de “swap”.

Diversificar el suministro energético para la Región del Bío Bío es el objetivo que está detrás de un inminente acuerdo administrativo que se espera se concrete ahora en agosto, lo que en la práctica significará el retorno de gas natural argentino a la zona, que según cálculos optimistas de la seremi del ramo, ocurriría este 2017.

Cabe recordar que los ministros de energía de Chile y Argentina se reunieron en mayo pasado en la ciudad de Salta, precisamente, para afianzar lazos y trazar los mecanismos que permitan a ambos países comercializar tanto electricidad como energéticos, en este caso, gas natural.

Esto, a diez años del famoso “cierre de llave del gas” por parte de Argentina, lo que trajo negativas consecuencias económicas para Chile.

Así lo confirmó el intendente de la Región del Bío Bío, Rodrigo Díaz, quien eligió cautela a la hora de hablar de plazos. “El Gobierno de la Presidenta Bachelet ha hecho grandes esfuerzos por dar las facilidades administrativas para que se lleve a cabo este importante proyecto estratégico. Dependerá de privados la fecha en la que llegue el gas natural, pero desde el Gobierno seguiremos apoyando esta iniciativa clave para la Región del Bío Bío”.

Díaz resaltó el alcance del inminente acuerdo, al que catalogó de “muy importante” para seguir consolidando el desarrollo de la Región, así como también el impulsar las relaciones con el gobierno argentino y la provincia de Neuquén. “Esta alianza es virtuosa para el presente y futuro del Bío Bío y va en la línea de la internacionalización de la Región que desde el Gobierno Regional hemos encabezado”.

Detalles

“La modalidad elegida es el swap energético, es decir, el envío de energía por un punto, y su retribución en gas a través de otro punto distinto al del envío. Bajo ese esquema, el gas argentino ingresaría vía Gasoducto del Pacífico (ver mapa) a la Región del Bío Bío. Esto podría beneficiar tanto a clientes residenciales como a industriales”, acotó la seremi de Energía, Carola Venegas, recordando que existe una importante red residencial que en su momento se utilizó.

 Se destaca que este protocolo de intercambio incluiría varias cláusulas, como por ejemplo que el swap entre ambos países no interferirá con la seguridad energética interna y que en caso de estar en riesgo se suspenda. Los volúmenes dependerán de las necesidades tanto de Chile como de Argentina sin que afecte la operación de los sistemas eléctricos.

Consultada la seremi de Energía sobre volúmenes y precios, aclaró que esto es un acuerdo administrativo, es decir, dependerá de los actores privados esos aspectos.

“De ellos dependerá el tipo de contrato, volúmenes y precios, aunque dada las circunstancias internacionales del energético, marcada por precios muy competitivos, todo hace augurar que el gas entraría a un muy buen precio, con impacto positivo no sólo para el sector industrial, sino también residencial”.

Consultada si no hay una señal confusa desde el Gobierno que por una parte apoya terminales gasíferos en la bahía de Concepción, y por otro, importaciones de gas desde Argentina, la seremi planteó que no, argumentando que algo que aprendió el sector, es que se deben diversificar las fuentes de suministro, más allá si calza o no la futura eventual oferta con la demanda, ya que, dijo, hacia adelante se debe pensar en contar con más infraestructura para llevar gas a otras regiones, desde Bío Bío.