Alcalde de la comuna, Henry Campos, adelantó que recurrirán a diferentes instancias para evitar que se construya el proyecto de inversión.
Pese a resistencia de parte de la comunidad, la Comisión Evaluadora del Bío Bío aprobó ayer en forma unánime el proyecto Terminal GNL Talcahuano, cuya inversión asciende a los US$160 millones.
De esta manera, la empresa inversiones GNL Talcahuano S.p.A está en condiciones de iniciar la construcción, que según cronograma establecido en su Estudio de Impacto Ambiental, partirían este 1 de septiembre.
Efectivamente, la comisión, presidida por el intendente, Rodrigo Díaz, y que contó con la participación los seremis de Medio Ambiente, Desarrollo Social, Salud, Energía, Economía, Obras Públicas, Vivienda, Agricultura, Transportes y Minería, además del director Regional del SEA, quien actúa como secretario votaron a favor argumentando que cumple con la normativa ambiental vigente, inhabilitándose el seremi de Transporte, César Arriagada. En tanto, la seremi de Energía, Carola Venegas, emitió un doble voto, ya que subrogó a su símil de Minería ausente ayer en la votación ocurrida en el edificio del Gobierno Regional.
Argumentos en contra
La vocera de la Coordinadora Chorera, Carolina Arriagada, tomó la palabra antes de la votación, y expresó su preocupación por los impactos ambientales que provocaría este proyecto, criticando a la empresa por lo que calificó un proceso de participación ciudadana fallido y, por lo tanto, poco representativo, uno de los puntos relevantes de los opositores a esta iniciativa.
A quien también se le asignaron siete minutos para exponer ante la Comisión Evaluadora fue al alcalde de Talcahuano, Henry Campos, quien explicó que no está en contra del desarrollo, pero que se formó la convicción de que este proyecto adolece de varios vicios, como es el tema de un supuesto fraccionamiento, en el sentido de que el Estudio de Impacto Ambiental no se hace cargo de la conexión a algunos de los gasoductos que operan en la zona.
Asimismo, mostró su preocupación por los efectos sinérgicos que podrían causas la operación de dos terminales gasíferos en la misma bahía (en alusión al que impulsa Biobiogenera-GNL Penco Lirquén), sobre lo cual el EIA no se refiere, apuntó el jefe comunal.
“Estudiaremos los caminos a seguir para evitar que este proyecto se construya así como está. La Superintendencia del Medio Ambiente y los propios Tribunales Ambientales pueden ser una de las instancias a acudir”.
En tanto, el abogado de la empresa GNL Talcahuano, Waldo Ortega, desestimó las críticas al proyecto, explicando que la institucionalidad vigente aprobó un proyecto que traerá energía limpia y más barata a la zona.
Visión de los gremios
Consultado el gerente de Asexma Bío Bío, Alfredo Meneses, éste comentó que se hacen necesarias ahora más que nunca inversiones en la zona dada la coyuntura económica.
“Siempre que se ajusten a derecho y a las leyes medioambientales y se hagan cargo de sus impactos, vemos como positivo la construcción de este proyecto”, dijo Meneses.
Por su parte, el presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción, Ricardo Gouët, dijo que “si este proyecto cumple con la normativa vigente y logra traer nuevamente gas natural a la región para abastecer a la industria, a las generadoras y a la comunidad en general, será beneficioso, pues permitirá mejorar la calidad del aire en comunas declaradas como Zona Saturada”.
Por otro lado, y consultado por el futuro de la bahía con la eventual entrada en operación de un segundo terminal, planteó que “nos parece interesante que exista competencia que permita alcanzar precios más atractivos y mayor capacidad de abastecimiento de gas natural a la zona; por lo que, no habiendo impedimentos técnicos, nos parece positivo que desarrollen otros proyectos en la bahía”.