La clave es entender si es un fenómeno “natural” o esconde algún otro efecto. Hubo consenso en que la demanda está cubierta por alto número de iniciativas en desarrollo y en el factor político-económico.

Una notoria caída han demostrado las inversiones energéticas ingresadas a tramitación ambiental al primer semestre de este año, anotando una baja de 62% a nivel nacional y un 92% en la Región del Bío Bío respecto a igual periodo de 2016, esto es, diez proyectos por US$1.082 millones v/s los cuatro US$86,8 millones de 2017.

Mientras algunos dan a entender que se debe a la alta tasa comparativa, otros opinan que es un signo más de la desaceleración económica y la consiguiente baja en la demanda.

Pero hay matices importantes que hay que conocer para entender las reales causas y efectos de estas cifras de caída de inversión proyectada en el sector energético.

El gerente de la consultora Wolfson Solutions, Rodrigo López, dijo que primero existe una explicación política-electoral para entender un congelamiento de las inversiones en varios sectores de la economía.

Sumó que hay que recordar que hubo un boom de proyectos ingresados en los años anteriores, lo que deja una alta tasa comparativa a la hora de leer el 92% menos de iniciativas energéticas ingresadas al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (Seia).

Mismo argumento usó la seremi de Energía, Carola Venegas, quien desestimó la importancia de los porcentajes de caída de la inversión del sector.

Pero añadió que “el sector ha tenido un crecimiento enorme, pasamos de tener 4.000 MW de capacidad instalada a 5.000 MW, es decir, un crecimiento de 25% en tres años, por lo tanto, pretender que esa tasa de crecimiento se puede dar anualmente es imposible. Ahora corresponde que haya un ciclo de crecimiento con otro ritmo, pero los objetivos trazados están cumplidos, porque entregaremos un sector renovado , con precios competitivos y una industria que fue pionera en capturar estos nuevos precios, lo que me parece absolutamente saludable”, enfatizó la seremi de Energía, Carola Venegas.

Crecimiento v/s demanda

Desde la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción, su presidente, Ricardo Gouët, dijo que la actual demanda de energía eléctrica ha experimentado un menor crecimiento del esperado, entre otras razones por la coyuntura económica del país. A la vez que, la incorporación de proyectos de energías renovables no convencionales y de nuevos actores en el mercado, han llevado a una disminución de los precios”.

“Bajo este escenario, la actual oferta de energía eléctrica es capaz de satisfacer la demanda y existe un número importante de proyectos en proceso de aprobación ambiental para satisfacer un futuro aumento de ésta”.​​

Y el economista de Corbiobio, Ariel Yévenes, sostuvo que no obstante la desaceleración, en la medida en que la economía en general vaya recuperando ritmos de expansión se debiese ir incrementando consecuencialmente la demanda energética proyectada y, a la postre, incentivar la generación de nuevos proyectos en el área, en lo cual la generación energética por la vía de energías alternativas más amigables con el medio ambiente jugarán un rol fundamental, siguiendo la tendencia, de data más bien reciente, en torno a privilegiar estas fuentes de generación, explicó.