2 de enero, por unanimidad, el Senado aprobó el proyecto que establece el feriado, permitiendo una celebración más larga de Año Nuevo.
2 de enero, por unanimidad, el Senado aprobó el proyecto que establece el feriado, permitiendo una celebración más larga de Año Nuevo.
El feriado del lunes 2 de enero, al empezar el año, es la oportunidad para recargar energías hasta que las personas tomen sus vacaciones, lo que ocurre frecuentemente en febrero entre los chilenos.
Nélida González, gerente de Reclutamiento y Selección de la empresa de recursos humanos GrupoExpro, explica que si no hubiera sido feriado el 2 de enero, probablemente habría sido un día de baja productividad laboral, pues las personas estarían en sus puestos de trabajo, pero con sus mentes aún en los festejos y recuperando energía.
"Si bien se pierde un día de trabajo, este feriado puede convertirse en una oportunidad para aumentar la productividad laboral de las personas si ocupan este feriado como una ocasión de descanso y regresar con bríos el martes al trabajo a resolver temas, agendar reuniones y hacer planes para el inicio de esta nueva etapa", acota.
Según la ejecutiva, que el feriado sea un lunes reduce el impacto negativo en la productividad.
"Cada vez que se produce un descanso, incluso los fines de semana, se genera una desconexión mental con las actividades de trabajo que son difíciles de retomar, lo que afecta la productividad. Si el feriado hubiera sido a mitad de semana, se produce en pocos días un ciclo de conexión mental con el trabajo, desconexión y luego conexión, lo que entorpece el desempeño", advierte González.