La autoridad decretó una sobretasa arancelaria de 9,8% a las importaciones de barras de acero para hormigón originarias de México.
La autoridad decretó una sobretasa arancelaria de 9,8% a las importaciones de barras de acero para hormigón originarias de México.
Como "insuficiente" calificaron las empresas siderúrgicas chilenas, CAP y Gerdau, la sobretasa arancelaria de 9,8% a las importaciones de barras de acero para hormigón con muescas, cordones, surcos o relieves originarias de México decretada este jueves por la autoridad.
Mientras que desde la contraparte, la siderúrgica DeAcero, ya analizan una apelación en instancias internacionales para revertir la medida.
La comisión encargada de investigar la existencia de distorsiones en el precio de la mercadería importada (Cndp) inició la investigación por un supuesto dumping de acero mexicano, el pasado 27 de noviembre de 2015, tras la solicitud de ambas empresas chilenas, al detectar competencia desleal por parte de sus competidores americanos.
Para corregir dichas "distorsiones", solicitaron una sobre tasa de 27,5%, sin embargo de manera provisional la comisión solicitó una de 11,01% y este miércoles falló de forma definitiva con una tasa de 9,8%.
Según trascendió, la decisión de la autoridad no cayó bien al interior del Grupo CAP, que participa en el negocio a través de la siderúrgica Huachipato, ya que consideraron mezquina la medida ofrecida por el ejecutivo.
Incluso, el gerente general de CAP Acero, Ernesto Escobar declaró que "el porcentaje establecido por esta resolución (9,8%) viene a resolver sólo parcialmente el problema planteado, persistiendo la amenaza sobre la producción nacional de barras para refuerzo de hormigón".
Los trabajadores de Huachipato, en tanto, afirmaron que la medida pone en peligro la viabilidad del negocio local. "Si bien valoramos la intención de la autoridad, la medida no defiende lo que nosotros hemos planteado, que es la viabilidad de la empresa y la pérdida de puestos de trabajo, a raíz de la competencia desleal", indicó el Secretario General del Sindicato Nº1 de Trabajadores de Huachipato, Héctor Medina.
Una respuesta similar dio el gerente general de Gerdau en Chile, Ítalo Ozzano, quién aseguró que la tasa "si bien es menor a la que habíamos solicitado en nuestra presentación de noviembre de 2015, por un 27,5%, constata que DeAcero ingresaba sus productos al mercado chileno a precios menores de los que son comercializados en México".
Y añadió: "Gerdau, como una industria comprometida con el desarrollo de Chile, cree que estas medidas debieran perdurar el tiempo que sea necesario, mientras no se corrijan de fondo las prácticas reñidas con la libre competencia de empresas como DeAcero y otras que están interviniendo en el mercado nacional".
Por su parte, Alacero, gremio que reúne a todas las siderúrgicas de América Latina, recordó que cuando se utilizan mecanismos reconocidos por la OMC, y que se ajusta a la regulación internacional "no hay mucho que decir".
Los caminos de DeAcero
La mexicana, que distribuye el acero a través de Ebema, ya analiza sus próximos pasos a seguir.
En una entrevista con Pulso, el gerente de exportaciones de acero de Latinoamérica de DeAcero, German Gasca, aseguró antes de conocerse la medida, que podrían dejar Chile de tener una decisión adversa.
Asimismo, indicó que buscarían apelar a la decisión de la comisión. "Nosotros somos respetuosos por las decisiones que se pueden tomar por parte de la autoridad, pero activaríamos todas las vías. La primera sería contar con el gobierno mexicano para poder resolverlo; el segundo, existen paneles para resolver este tipo de controversias en el tratado de alianza del pacífico y también tenemos muy claros la Organización Mundial del Comercio (OMC), donde se pueden dirimir todos estos casos".
Sin embargo, advirtió que esta última opción se tomaría si la decisión de la comisión no está apegada a los lineamientos técnicos.