De acuerdo a lo señalado por el consorcio argentino-español habrían hechos que afectaron el proceso de licitación que ya fue ratificado por la SCJ.
De acuerdo a lo señalado por el consorcio argentino-español habrían hechos que afectaron el proceso de licitación que ya fue ratificado por la SCJ.
Felipe Placencia Soto
felipe.placencia@diarioconcepcion.cl
La licitación del esperado casino Chillán, adjudicado por la firma penquista de Marina del Sol, vuelve de nuevo a la polémica, ya que Boldt-Peralada (consorcio argentino-español) informó sorpresivamente ayer en la tarde que recurrirá nuevamente a la justicia, pero esta vez para objetar el resultado ratificado por la Superintendencia de Casinos de Juego.
¿Los argumentos? Son cinco, entre los destacables, "que el ex superintendente de Casinos, Renato Hamel, no excluyó a Marina del Sol del proceso, pese a reconocer que su boleta de garantía bancaria había vencido, y contar con un informe en derecho del departamento jurídico de la superintendencia, cuya conclusión era que Marina del Sol debía ser eliminado del proceso".
También, que el proyecto presentado por Boldt-Peralada "fue declarado, de acuerdo al conjunto de evaluaciones realizadas por la Superintendencia de Casinos (SCJ), Ministerio del Interior y Municipalidad de Chillán, mejor que el de la competencia".
Además, sobre el anterior punto, la firma añadió que "los informes de evaluación técnica de la SCJ son concluyentes en afirmar que la propuesta de Boldt-Peralada era muy superior a la de Marina del Sol. Entre otros puntos, era el que aportaba mayor inversión, incrementaba más la oferta cultural y turística, contaba con la mejor ubicación, diseño y calidad de las instalaciones.
Uno de las aseveraciones que siempre sostuvo el abogado de Bold- Peralada, Ricardo Abdala, volvió a resurgir, ya que en los argumentos presentados aseguran que "el Gobierno Regional del Bío Bío, bajo el argumento de riesgo de ludopatía, debido a la "cercanía" a un centro educacional, y pese a que el Casino de Marina del Sol está próximo al mismo recinto, favoreció en su carácter de decidor político a Marina del Sol, otorgándole 300 puntos a su proyecto y 0 puntos al resto de los competidores. El Gore sustentó esta hipótesis por medio de una tesis de pregrado de una estudiante de Guatemala y ensayos sacados de Internet" y que el Gore además los excluyó por no "estar conectado al sistema eléctrico central".
El presidente de Marina del Sol, Nicolás Imschenetzky, manifestó en entrevista anterior con Diario Concepción que un nuevo intento judicial de Boldt- Peralada era "ciencia ficción" y que sólo espera iniciar la edificación y terminarla en un año.