Se trata de actividades privadas que tienen un interés público y cuyo principal propósito no es la maximización del beneficio sino el logro de ciertas metas económicas y sociales. Su apuesta es desarrollar soluciones innovadoras frente a los problemas de la sociedad.
Se trata de actividades privadas que tienen un interés público y cuyo principal propósito no es la maximización del beneficio sino el logro de ciertas metas económicas y sociales. Su apuesta es desarrollar soluciones innovadoras frente a los problemas de la sociedad.
A nivel mundial podemos observar que problemas de tipo social, económico, político y por sobre todo medio ambiental están afectando, y lo seguirán haciendo, a nuestra economía. Por lo anterior, hace un tiempo, entre los principales objetivos que deben cumplir tanto los gobiernos locales y de todo el mundo como las organizaciones transversales, están lograr la sustentabilidad y disminuir la pobreza y la desigualdad.
A lo largo del tiempo también hemos observado que la sociedad en su conjunto está cambiando su mirada. Eso se ve en los jóvenes, quienes se han manifestado constantemente, por ejemplo mediante las redes sociales, a favor del respeto a los derechos, la solidaridad y en general por el manejo apropiado de los recursos naturales.
Es así como hoy gran parte de los consumidores han adquirido una nueva tendencia orientada a consumir en empresas sustentables tanto en lo social como en lo ecológico. Aquello ha generado, y lo seguirá haciendo, un desafío importante para gran parte de las industrias, pues hoy entregar solo un producto o servicio de calidad a un precio razonable, ya no lo es todo. La tendencia de consumo los obligará a internalizar el costo para la sociedad que tiene la producción de sus bienes y orientar la propuesta de valor de su producto hacia potenciar efectos positivos en la sociedad.
Origen y avance
Si analizamos la tendencia mundial y nacional en las organizaciones con fines de lucro, estas en gran medida han optado en un inicio por cultivar y potenciar dentro de su cultura organizacional la responsabilidad social empresarial. Esta genera que las organizaciones, observen su entorno y busquen la solución de problemas sociales. Es así como muchas de estas empresas lograron concretar y medir resultados de su impacto social y económico, viéndose favorecidas en el tiempo. Partiendo de esta base y, a través de los años, las organizaciones han potenciado más esta mirada y así se han conformado las organizaciones sin fines de lucro, Ongs, insertas dentro de los emprendimientos sociales, cuyo objetivo es aumentar el compromiso social con los colectivos y territorios más desfavorecidos y, por ende, trabajar en la construcción de una sociedad accesible para todos.
Luego de la creación de estas organizaciones se ha continuado avanzado, llegando a formarse las llamadas empresas sociales. Hoy estas son una tendencia mundial. Se originan con el objetivo de trasformar la industria y organizaciones existentes, en organizaciones que cumplan con solucionar algún problema social, respetar el medio ambiente y ser económicamente rentables y auto-suficientes. Este tipo de empresas ha tenido un rápido crecimiento en la cantidad e impacto social a través del mundo.
Definición
Para muchos aún es desconocido en qué consiste una empresa social. Según la definición de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, estas empresas corresponden a una actividad privada dirigida hacia el interés público, organizadas con una estrategia emprendedora, pero cuyo principal propósito no es la maximización del beneficio sino el logro de ciertas metas económicas y sociales, y la cual tiene una capacidad de entregar soluciones innovadoras a los problemas.
Tal como es definida por el economista Muhammad Yunus, Premio Nobel de la Paz, "un negocio auto-sostenible sin pérdidas ni dividendos que aborda un objetivo social dentro de las normas del mercado actual". Por tanto, la empresa social es una empresa rentable que también genera una contribución al medio ambiente y sociedad en general.
Realidad en Chile
Chile no está al margen de esta tendencia mundial. Así queda claro tras conocer los resultados de la cuarta versión del premio anual B Corp Best for the World (Mejores Empresas B para el Mundo) entregados el año 2015 y que reconocen a aquellas empresas que se encuentran en el 10% de los mejores puntajes como Empresas B o sociales. De un total de 1.200 corporaciones de 120 industrias diferentes, 13 empresas chilenas fueron galardonadas por su buen desempeño y aporte al bienestar del mundo, convirtiéndonos en el país más premiado de América Latina.
Los emprendimientos sociales están en el país y se desarrollan en colaboración con incubadoras y aceleradoras, alianzas con entidades de gobierno y organizaciones benéficas tradicionales y seguirán evolucionando y contribuyendo en gran medida al manejo sustentable, pobreza y equidad.
Es muy importante recalcar que como sociedad debemos evolucionar, debemos tener conciencia de nuestro entorno, ser solidarios y responsables con nuestro medio, logrando que exista una cohesión entre el sector público, privado y sociedad en general. Las empresas deben transitar a este tipo de organizaciones, que han llegado para establecerse y coexistir con organizaciones tradicionales, pero que sin duda podrán contribuir a cambiar nuestra economía, hacia una rentable y auto-sostenible.