La autoridad de Gobierno advirtió que si bien en la actualidad no hay sequía agrícola, se debe esperar la evolución de los próximos meses.

 

Felipe Placencia Soto
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Una de las preocupaciones del mundo agrícola y ganadero es el actual déficit hídrico que afecta a la Región del Bío Bío y la poca nieve caída en la cordillera. Consultado al respecto el ministro de Agricultura, Carlos Furche, en su última visita a la región durante la semana pasada, enfatizó que en este momento no hay emergencia. Sin embargo, proyectó que si en la primavera no llueve lo suficiente, podríamos estar "en problemas".

A la fecha, la autoridad ministerial estimó que hay un 40% menos de lluvia. Es por ello que la Seremi de Agricultura, la Dirección de Obras Hidráulicas ( DOH), y la Dirección General de Aguas (DGA) se reunieron hace unos días en Los Ángeles con la finalidad de analizar los datos en profundidad, los que serán validados durante los próximos 15 días, para así tomar las medidas necesarias para contrarrestar una eventual crisis en el verano.

De las provincias de Concepción, Ñuble, Arauco y Bío Bío, todas presentan una disminución similar, pero es esta última la que presenta una condición de menor caída de lluvia. 

"Se encuentra con déficit de un 35% en un año normal. Respecto al año anterior hay caos más positivos y otros que están en igualdad de condición. Respecto al año pasado la provincia del Bío Bío tiene un déficit de 10% de agua caída registrada y 35% menos respecto a los datos históricos registrados", detalló el director regional de aguas, César Saavedra Segura.

La autoridad especializada además añadió que "si lo comparamos desde el punto de vista de lo que nos importa para la disponibilidad de agua para el riego, hay que esperar el pronóstico de deshielo y darle seguimiento".

Es por ello que el seremi de Agricultura Bío Bío, Rodrigo García, hizo un llamado a los agricultores a estar atentos a la situación que los atañe directamente en sus producciones.

"Lo que hacemos es cambiar la forma de enfrentar el déficit de precipitaciones y estamos conscientes de que estamos a un 40% de un año normal, menores al año pasado. Lo que queremos es que los agricultores estén conscientes de esto y tengan información para que tomen mejores decisiones. El cambio climático es una realidad y ese cambio climático provocará un cambio en las precipitaciones", resaltó García.

El jueves de la semana pasada el ministro de Agricultura, Carlos Furche conversó con Diario Concepción sobre la coyuntura y evidenció su preocupación, sin embargo, también llamó a la calma.

-Hay preocupación por la falta de lluvia, de lo que pudiera ocurrir a futuro. ¿El Gobierno está tomando ya las medidas a futuro para enfrentar una eventual crisis?

-Hay que diferenciar. Un problema es el déficit hidrológico que está en torno al 40% respecto de una año normal. Eso no necesariamente quiere decir que hay una sequía agrícola, que no la hay hasta ahora. Estamos recién finalizando el invierno y es básicamente con lo que ocurre en la disminución de las napas y por tanto, con los APR y el abastecimiento de agua potable. Por ahora y recalco, no hay impacto sobre la agricultura y la ganadería. Más bien lo contrario, como ha sido un invierno benigno, con niveles de temperatura mejores que el promedio, ha habido buen crecimiento de pastos, buenas posibilidades de sembrar. Las siembras de invierno están todas normales, pero sin duda hay que esperar qué ocurre en la primavera.

-La disminución en la caída nieve preocupa para el abastecimiento del verano.

Insisto. Hay que diferenciar sobre el concepto de sequía hidrológica, técnicamente estamos en una sequía hidrológica que respecto a una sequía agropecuaria no tenemos.

En este momento las actividades agrícolas y pecuarias, no están afectadas por esa menor precipitación, pero el punto crucial en todo esto es qué veremos, qué ocurre en la primavera. Si tenemos una primavera muy seca, efectivamente sí vamos a estar en un problema.