Investigación reveló que el 68% de los consultados considera que la falta de oportunidades para las mujeres impide que éstas accedan a cargos directivos.
Investigación reveló que el 68% de los consultados considera que la falta de oportunidades para las mujeres impide que éstas accedan a cargos directivos.
Pese a que la participación laboral de la mujer ha crecido exponencialmente durante la última década, alcanzando casi un 50%, aún existen brechas que acentúan las desigualdades de género en materia profesional. Así lo dio a conocer la quinta edición de la encuesta sobre Confianza e Imagen Empresarial, realizada por Sofofa y Cadem.
De acuerdo a la investigación, el 42% de los encuestados prefiere tener un jefe hombre, mientras que un 37% se inclinó por jefaturas femeninas.
Estas cifras varían levemente dependiendo de los consultados: entre los hombres, el 45% optó por jefaturas masculinas y el 28% por una femenina. En tanto, el 44% de las mujeres respondió que prefería tener una jefa de su mismo género, mientras que el 39% optaría por un hombre para desempeñar esa función (ver gráfico 1).
Otro de los aspectos contemplados por el estudio tiene relación con las preferencias al momento de una contratación. En este ítem, el 59% de los consultados dijo no importar el género, mientras que el 27% optaría por una mujer y el 13% eligiría un hombre.
Estos resultados también cambian de acuerdo a los encuestados: el 63 por ciento de los hombres aseguró no importarle, mientras que el 22% preferiría alguien del mismo género y sólo un 14% optaría por una mujer.
En tanto, de acuerdo a las consultadas, sólo un 5% prefiere contratar a un hombre, el 39% optaría por una mujer y un 56% de las encuestadas asegura no tener preferencias por un género en este aspecto.
Sobre estas diferencias, la gobernadora de la Provincia de Concepción Andrea Muñoz aseguró no compartir "para nada ese tipo de apreciaciones".
La autoridad gubernamental argumentó que "muchos estudios referentes a este tema afirman que en la medida que hayan más mujeres en niveles ejecutivos, el crecimiento de las empresas e instituciones es mucho más importante".
Opinión similar es la que tiene María José Cofré, socióloga penquista y directora ejecutiva de Consultora Análisis, quien señaló que "esta es una discriminación cultural que lleva muchos años arraigada. Que se de esta situación no me parece extraño, pero si seguimos así vamos a continuar sin posibilidades de renovarnos".
"Estamos estancados hace mucho tiempo", sostuvo Cofré.
De acuerdo a la socióloga, esta situación se debe a que en las instituciones y empresas hay una estructura organizacional muy arraigada, lo que no permite avanzar en esta materia.
"Como los jefes son en su mayoría hombres, no se confía en las mujeres. La mayoría de las jefaturas de las grandes empresas son hombres y son sumamente tradicionales en su forma de vestir, forma de actuar, forma de hacer los negocios", enfatizó.
"Hay una visión –añade– mucho más renovada desde el mercado extranjero, que tiene que ver con que muchas de las empresas dirigidas por mujeres son más integrales, mucho más adaptables al cambio y con más capacidades de desarrollarnos para la innovación y la creación".
Precisamente, el 68% de los encuestados considera que la falta de oportunidades para las mujeres impide la participación de éstas en altos cargos directivos de empresas y entidades. El resto de los consultados afirma que este fenómeno se debe a que no hay suficientes mujeres con la experiencia y trayectoria para asumir estos puestos.
Mujeres más responsables
Pese a que, a grandes rasgos, el estudio reveló una inclinación en las preferencias hacia las jefaturas masculinas, hay un elemento donde las mujeres se destacan: la responsabilidad.
En efecto, ante la pregunta: "¿Quién cree usted que es más responsable?" el 51% de los participantes respondió que las mujeres cumplen más con este atributo, mientras que los hombres sólo alcanzaron un 5% y el 44% aseguró no encontrar diferencias entre ambos.
Para la directora de la Consultora Análisis esto podría deberse a que "el nivel de compromiso laboral, no sólo de las jefaturas, es mucho más potente por parte de las mujeres".
Otro de los atributos incluido en el estudio fue la capacidad de innovación y creatividad al interior de una institución. En este acápite, un 38% destaca a las mujeres, un 7% a los hombres y un 54% no percibe diferencias.
Dificultades
La medición reveló además que ante la pregunta: "¿Cuál es el principal impedimento que usted ha enfrentado para lograr un mayor desarrollo en su carrera laboral?" (realizada sólo a mujeres), el 33% de las consultadas se inclinó por la dificultad de compatibilizar el rol de madre y el trabajo fuera de la casa. Un 26%, en tanto, aseguró no tener impedimentos, un 18% optó por la falta de una educación de mayor calidad y el 12% por la falta de oportunidades de ascenso frente a los hombres (ver gráfico 2).
Sobre este tema, la gobernadora de Concepción sostuvo que "siempre los avances son delicados en términos de igualar salarios, de desarrollo, y de atender el cuidado de los hijos del hogar en forma compartida".
"Esperamos que la sociedad respete las diferencias como un aporte y no como un menoscabo hacia las mujeres. Es importante que toda la sociedad valore el aporte que hacemos las mujeres en las diversas instancias", apuntó.
Asimismo, respecto a los obstáculos que deben enfrentar las mujeres en cargos de jefatura, la autoridad sostuvo que "nos encontramos con las mismas dificultades que un hombre en cuanto a los desafíos de liderar una institución. Adicionalmente a eso, hay un tema cultural que hay que enfrentar, que tiene que ver con que la sociedad se haga cargo del cuidado de los hijos. Esto debe ser garantizado para hombres y mujeres con salas cunas y todas las políticas, tanto privadas como públicas, para poder desempeñar las funciones sin sentir que se está descuidando a los hijos".
Finalmente, ante la pregunta: "¿Qué impresión tiene frente a la mayor participación laboral de la mujer?" (realizada sólo a hombres), el 43% de los participantes en la medición afirmaron que es una ventaja porque les ayuda a realizarse personalmente. Un 42%, en tanto, sostuvo que es una ventaja para la familia porque le aporta otros ingresos.
Cabe señalar que la encuesta se realizó a 1.014 personas, de los cuales el 55% tiene actualmente un jefe hombre, mientras sólo el 27% tiene a una mujer.