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Déficit hídrico regional llega al 60,61%, siendo el peor desde el ocurrido en 1998

Último informe de la Dirección General de Aguas, DGA, muestra lluvia caída en rojo: Concepción, -51,1%; Cañete, -54,7%; Chillán, -45,3%; Los Ángeles,-66,6%; Pangue, -80,6% y Abanico con -65,4%.

Por: Diario Concepción 12 de Julio 2016
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Último informe de la Dirección General de Aguas, DGA, muestra lluvia caída en rojo: Concepción, -51,1%; Cañete, -54,7%; Chillán, -45,3%; Los Ángeles,-66,6%; Pangue, -80,6% y Abanico con -65,4%.

Felipe Placencia Soto
felipe.placencia@diarioconcepcion.cl

El déficit de lluvia caída este año en la Región del Bío Bío llega al 60,61%, lo que se traduce en la peor cifra desde el año 1998, donde la escasez de agua conllevó a emergencias agrícolas y de energía.

El promedio sale del último informe de la Dirección General de Aguas regional, DGA, dependiente del Ministerio de Obras Públicas Bío Bío, donde los porcentajes de las seis estaciones de medición en negativo: Concepción, -51,1%;Cañete, -54,7%; Chillán, -45,3%; Los Ángeles,-66,6%; Pangue, -80,6% y Abanico con -65,4%.

Esto quiere decir que en Concepción sólo han caído 327,5 mm versus los 670 mm normales que deberían haber a la fecha. En el caso de Cañete es de 314,0 mm, cuando ya habían 693,7 mm en igual periodo.

En cuanto a Chillán, hoy sólo se registran 339,2 mm, mientras que lo esperable es 619,9 mm. Los Ángeles presenta el más bajo con 211,2 mm, siendo el usual 632,3.

Por su parte la cuenca de Pangue es la más crítica, ya que los números muestran 390,40 mm. Lo normal debería ser 2010,2 mm. La misma situación presenta Abanico con 400,50 mm, pudiendo ser 1157,4 mm.

"Esto es una clara señal de que tenemos una grave déficit de agua caída", señaló el seremi de Obras públicas René Carvajal, en representación de la DGA, servicio que está bajo su alero.

Es por ello que la autoridad de Gobierno hizo una petición: cuidar el agua. 

"El llamado es a que cuidemos el agua que tenemos para regar nuestros campos, que hagamos un manejo adecuado, con mucha actitud conservadora, no despilfarrar el agua, cuidarla al máximo. La situación es crítica este año", aseveró Carvajal.

Sector Agrícola

La misma preocupación tiene el Consorcio Agrícola del Sur, CAS, junto a Socabío. Ambas son presididas por José Miguel Stegmeier, quien teme por lo que pueda ocurrir en durante el verano, cuando se necesita agua para los regadíos, la cual se obtiene de los ríos y pozos. 

"Lo que pasa es que la lluvia de hoy, la de ayer y la poca y nada que ha caído en el otoño, ha significado que uno pueda seguir trabajando y sembrando. El tema es que no hay nada para la reserva. Los pozos siguen estando secos. Los ríos no llevan nada de agua, prácticamente secos, casi igual que en febrero y en marzo", analizó Stegmeier.

También manifestó alerta por otro factor. "Tenemos que no hay nada de nieve. Lo que cayó el fin de semana es menor, tiene que ser en metros para la acumulación de reserva y ahora son sólo centímetros", indicó Stegmeier, ya que se mostró preocupado por el lago Laja, el que se nutre de este elemento en la medida que se derrite. 

¿Por qué ocurrió esta "sequía"? De acuerdo a José Miguel Stegmeier, el fenómeno del niño no fue tan lluvioso como se esperaba, lo que viene a aumentar la incertidumbre, ya que ahora se espera de paso en un tiempo a la niña que en teoría trae menos agua caída. "Da la sensación de que esto va a ser un cambio muy rápido, en que saltara del niño a la niña, la cual representa sequía", señaló.

¿Solución?

Si bien esta problemática obedece a un fenómeno del orden natural, para el presidente de CAS y Socabío, la solución es que se aumente el número de embalses.

"Necesitamos embalses, embalses y embalses. Ese es el norte de Chile. Si nosotros no generamos mucha más capacidad para generar agua, la verdad es que no vamos a poder cumplir con ser una potencia alimentaria", recalcó Stegmeier.

Es por ello que llamó a que se incentive y se propulsen más instalaciones de este tipo con la finalidad de duplicar o más la capacidad de la superficie de regadío.

"Nosotros sabemos que con mayor cantidad de embalses, mayor sistema de construcción, con más inversión en la tecnología del riego, podríamos generar el ambiente para ser una potencia alimentaria", concluyó.

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