Un motor potente y silencioso, con inyección electrónica de combustible y un rendimiento de aproximadamente 35km por litro, es lo que ofrece este modelo.

CONCETUERCA: Por Fabián Rodríguez R.

El segmento Custom (motos tipo Chopper) es el menos explotado en Chile por las marcas japonesas como Honda, Suzuki o Yamaha.

No existe entre las motocicletas de baja cilindrada, que son las que representan más ventas, una gran variedad a la hora de cotizar, lo cual abre el camino a marcas de procedencia china como United Motors (UM), Takasaki, Kinlon, entre otras, para ofrecer vistosos y llamativos modelos en lo estético, en desmedro de la calidad del motor, las prestaciones de post venta y, en fin, la calidad del vehículo.

Pero la mayor tentación de todas es el precio, pues los modelos Custom chinos suelen ser increíblemente económicos. En este caso se aplica, no obstante, aquello de que lo barato cuesta caro.

En Suzuki advirtieron este nicho de mercado y crearon la GZ-150cc, cuya competencia más cercana son la Yamaha Enticer (125cc) y la Honda V-Men (125cc).

En estética, la GZ es sin dudas atractiva, con aplicaciones cromadas, llantas de aleación de aluminio y un panel muy simple, que consta de un indicador de marchas, velocímetro y medidor de nivel de combustible que la hacen ver simple, pero ruda.

Tiene un motor potente y silencioso, con inyección electrónica de combustible y un rendimiento de aproximadamente 35km por litro, que sumado a un tanque de 11,5 litros permite una autonomía nada despreciable de 400kms, más o menos.

En lo práctico, tiene una posición de manejo muy cómoda y relajada, tanto para carretera como para ciudad, espejos con gran visibilidad y un potente freno de disco delantero.

Sin dudas, es una moto para disfrutar caminos y paisajes con comodidad, incluso con acompañante. Sólo le cambiaría el freno de tambor trasero por uno de disco.

A ponerse la chaqueta de cuero y a rodar.