La Universidad había ya cumplido más de treinta años, con la iniciativa del rector Enrique Molina Garmendia, en 1946 se llamó a un concurso nacional de arquitectura, que resultó en dos edificios unidos por un puente, conformando un arco con un friso que representa el espíritu creador de la universidad. En el fondo, el campanil, construido en 1943, ejerciendo sobre el campus el “benévolo señorío de la cultura universitaria”, en palabras de Molina

Su sucesor, David Stitchkin, en 1956, propuso la ampliación del campus para la creación de nuevas carreras. Con este fin, se elabora un plan regulador, que en 1958 fue presentado a las autoridades de la Universidad, teniendo como base la construcción del Foro de la Universidad, a los pies del Campanil.

Al fondo, el edificio de la Biblioteca, inaugurado en 1972, obra de Duhart y Goycoolea, ambos Premio Nacional de Arquitectura, pasa a formar parte del Campus Universitario, recientemente reconocido como Monumento Histórico.